El Juzgado de lo Penal número 2 de Almería ha condenado a unos padres por un delito de abandono de familia debido al continuo absentismo escolar en el que se encontraban sus hijos, uno de los cuales estuvo más de un año sin escolarizar y que tuvo que ser matriculado de manera forzosa pese a lo cual repitió sus faltas de asistencia de manera injustificada.
La sentencia, consultada por Europa Press y sobre la que cabe recurso ante la Audiencia Provincial de Almería, impone a los progenitores impone a cada uno de ellos una multa de seis euros diarios durante nueve meses hasta los 1.620 euros por el incumplimiento de sus deberes inherentes a su patria potestad.
El fallo considera probado que tanto el padre como la madre de los menores, "a sabiendas de su obligación como padres de educar a sus hijos" y a pesar de ser advertidos de las "ausencias injustificadas y reiteradas" al colegio y al instituto de los menores, "no hicieron nada para evitar el absentismo escolar" de ellos.
En esta línea, destaca que la menor de sus hijas estuvo "un año sin escolarizar" cuando tenía 15 años, por lo que tuvo que se matriculada con "carácter forzoso" para que cursara segundo de la ESO. No obstante, para el 20 de octubre ya había faltado "más de 15 días", por lo que el tutor comenzó a avisar de las continuas ausencias.
El profesor no consiguió dar con los padres de la menor, quien faltó 24 horas lectivas en octubre, 57 en noviembre y 44 en diciembre, de modo que en enero del año siguiente no acudió ningún día al centro escolar. La inspección educativa de la Consejería de Educación también tuvo dificultades para notificar a los padres la ausencia de su hija a clase, de forma que solo se les pudo hacer llegar una resolución en el mes de marzo.
El juez Fermín Javier Villarrubia ha destacado que los acusados mostraron con el juicio "la misma falta de interés que respecto al absentismo escolar de sus hijos", puesto que la vista oral celebrada tras un segundo señalamiento se desarrolló con la ausencia de los padres, quienes no quisieron comparecer para ofrecer su versión.
"Los padres y acusados eran plenamente conocedores de la situación, mostrando una actitud de total desinterés, pasividad e irresponsabilidad, no solo ante las citaciones de las Administraciones, sino lo que es penalmente relevante, ante las ausencias injustificadas de sus hijos a los centros escolares, frente a lo que nada han acreditado que hicieran", señala el magistrado en sus fundamentos.