La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha condenado la agresión de varias personas a un joven de 20 años en Valencia al grito de "maricón", calificando de "inaceptable" la "complicidad con los discursos de odio".
"No debemos consentir que la violencia campe a sus anchas en nuestro país y coarte la libertad de nuestra juventud", ha expresado la también líder de Sumar en un mensaje en la red social X, reaccionando a la agresión de un joven en la zona de la Creu Coberta de Valencia.
Para Díaz, "es inaceptable" la complicidad con los discursos de odio, y ha recordado al joven Samuel Luiz, el joven de 24 años que falleció en A Coruña en la madrugada del 3 de julio de 2021 tras recibir una paliza en el paseo marítimo de la ciudad herculina, a la salida de un local de ocio nocturno.
"Lucharemos para que a nadie más le den una paliza o incluso maten por ser quien es", ha zanjado la vicepresidenta del Gobierno en su mensaje.
También se ha pronunciado sobre la agresión la candidata de Podemos a las elecciones europeas y exministra de Igualdad, Irene Montero, que ha mandado su cariño al joven y ha clamado "Basta de LGTBIfobia". "Que nadie mire para otro lado ni ante agresiones ni ante discursos que ridiculizan o violentan a las personas LGTBI. No es libertad, es odio.
¡Todo el mundo tiene derecho a ser quien es!", ha expresado Montero.
Un joven de 20 años ha resultado herido tras ser agredido este domingo en la zona de la Creu Coberta de Valencia, según ha indicado a Europa Press el Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU). El personal sanitario del SAMU ha atendido al joven, que presentaba heridas y contusiones. Posteriormente, ha sido trasladado por la unidad SVB hasta el hospital La Fe.
Según puede comprobarse en un vídeo remitido a los medios de comunicación por el Grupo Municipal Socialista del Ayuntamiento de Valencia, a quien se lo han hecho llegar los vecinos de la zona, un grupo de jóvenes le propina numerosas patadas y puñetazos a otro en una marquesina de autobús en la vía pública. Además, al mismo tiempo le profieren gritos e insultos, entre los que puede distinguirse "maricón". Al final de la grabación, la víctima parece desvanecerse en el asiento de la parada de autobús.
