La noticia corría como la pólvora por las redes. En foros, tertulias, grupos de wasap, asociaciones de variados tipos se comenta que el Buque Overseas Santorini lleva en sus bodegas una mortal carga de combustible para aviones de guerra israelíes. Lo que hasta no hace mucho era un material para la defensa de un país se ha convertido en el elixir macabro que siega las vidas de miles de palestinos. Y bien porque la naviera propietaria del buque, con sede en Atenas, se percatará de las dificultades que supondría un atraque sin retorno, gracias a la acción de los trabajadores del puerto de Algeciras; o bien porque el gobierno español se percatara de que no estaría bien visto que el buque con su mortífera carga recalara en el puerto español, cierto y verdad es que el Overseas no atracará en el puerto de Algeciras y según medios de comunicación afirman que en su hoja de ruta el barco tiene prevista su llegada a Gibraltar el 30 de julio a las 16 horas, surcando las aguas de la bella bahía, que un día de estos también podrían teñirse de rojo sangre.
Hay personas que piensan que el genocidio de Gaza no va con ellas. De ellas, algunas creen innecesarias las manifestaciones que en todo el mundo se celebran contra el mismo. Porque piensan que todo el asunto se dirime entre israelitas que matan y palestinos que son matados. Estas personas podrían hacer algo de memoria y situarse en la Europa de 1939. Millones de personas en Francia, Inglaterra… observaban, con esa conciencia de que nada iba con ellas, como la Alemania nazi masacraba a los polacos. Las gentes de los países neutrales Bélgica, Holanda, Noruega, Dinamarca, Suecia… en general asumían el papel de espectadores ante la barbarie. Pero les fue llagando el turno y una a una estas naciones cayeron bajo la barbarie germana.
Todas las guerras suelen estar lejos menos cuando caen las bombas cerca. Y entonces, siempre tarde cuando la desdicha llega, poco o nada es posible hacer. Amnistía Internacional lleva décadas reclamando a todos los gobiernos que no permitan que en sus territorios, tanto en puertos como en aeropuertos, se produzca el trasiego de armas y materiales para uso bélico.
La política exterior de las administraciones estadounidenses siempre ha apoyado la causa sionista y a estas alturas, después de requerirle al gobierno israelí un alto el fuego, sigue enviando combustible para aviones de guerra a Israel. Los barcos que desde EEUU transportan material de muerte, según Amnistía Internacional,
“el Overseas Santorini y su buque gemelo, el Overseas Mykonos, han atracado en la terminal petrolera de Asquelón al menos en 10 ocasiones desde enero de 2013 –seis veces desde enero de 2014– y entregado un total de 277.000 toneladas de combustible para reactores suministrados por el gobierno estadounidense a las fuerzas armadas israelíes”. Pocos meses antes de la invasión de Gaza llegó en anterior envío y ahora en agosto tiene prevista su llegada el tristemente conocido Overseas Santorini. En el día que se redacta este escrito se publica por la GBC (Gibraltareña) que aún no se ha recibido solicitud del buque para atracar en ese puerto. Es curioso observar que no es una empresa norteamericana la que realiza el cabotaje ya que la empresa OSG Ship Management (GR) Ltd, propietaria de los buques, tiene su sede en Atenas. Bien haría la Unión Europea aprobando una directiva que obligara a todos los países miembros a impedir el negocio de la muerte. .
Ante el genocidio de la población palestina retrasmitido en directo, para más inri, la comunidad internacional no ha procedido al embargo y bloqueo del tránsito de materiales de guerra a Israel, ni a Irán, que suministra apoyo al terrorismo de Hamas. Amnistía Internacional ha pedido que la situación de Israel y los Territorios Palestinos ocupados se remita al fiscal de la Corte Penal Internacional. Aunque EEUU esté más allá de esa corte penal, de los tratados internacionales que nunca firmó, haciendo y deshaciendo al amparo de la potencia militar que tiene. Si EEUU controla la OTAN y el centenar de bases militares que permiten su logística militar, entre las que ocupan lugar estratégico de importancia las andaluzas de Rota y Morón, ¿Cómo es posible hablar de “soberanía” en los países sujetos a sus políticas?
A estas alturas solo EEUU tiene capacidad para parar el genocidio de Gaza. ¿por qué no lo hace? ¿Qué secretas razones empujan al poderío militar de los Estados Unidos de América a permitir el genocidio del pueblo palestino? Quien pudo evitarlo y no lo hizo es cómplice de cualquier asesinato. Decenas de miles ya se cuentan en Gaza.
Queda a la ciudadanía tomar conciencia de quien es quien y exigir en cada país al gobierno de turno a que reconozca el estado Palestino, de forma que integrado como tal en Naciones Unidas pueda acogerse a los tratados internacionales que le permitan su existencia en paz y seguridad.
Fdo Rafael Fenoy