La Policía Nacional de Ourense investiga a los siete detenidos de un clan familiar de etnia gitana, seis hombres y una mujer, por su participación en el tiroteo ocurrido en la noche del pasado domingo en la entrada principal del hospital de Ourense, como presuntos autores de un posible delito de tentativa de homicidio y otro de tenencia ilícita de armas.
Los hechos tuvieron lugar sobre las 23:15 horas del domingo cuando la Policía Nacional recibió una llamada, alertando de que se habían producido una serie de disparos en el Complejo Hospitalario Universitario de Ourense.
Las dos familias que protagonizaron el altercado vivían juntas en el poblado de A Fontenla, en Maside (Ourense), aunque debido a desencuentros una parte se había trasladado a otro poblado a las afueras de la localidad ourensana, recogen fuentes policiales.
Según la información facilitada por la Comisaría de Ourense, los presuntos autores se bajaron de varios vehículos y efectuaron una docena de disparos contra la otra parte del clan que se encontraba en ese momento en la puerta del hospital y con los que mantienen anteriores enfrentamientos.
Como consecuencia de los disparos, dos personas resultaron heridas de escasa consideración siendo dadas de alta a las pocas horas.
Tras activar el protocolo de actuación, los agentes localizaron a dos de los autores de los disparos procediendo a su detención, y recuperaron dos escopetas y un rifle, presumiblemente utilizados en el ataque.
A estas detenciones, se sumaron las otras cinco practicadas en el día de hoy.
Tras la reyerta, el cristal de la fachada y el interior del vestíbulo del centro hospitalario recibieron una docena de impactos así como los vehículos en los que viajaron.
Fuentes policiales han apuntado que los autores de los disparos pertenecían al mismo clan familiar radicado en la localidad de Maside, al igual que las víctimas, con las que mantenían vínculos parentales.
Aunque desconocen los motivos de las desavenencias, han indicado que es conocido el "visceral enfrentamiento" entre ambos clanes.
Durante las dos primeras detenciones, los agentes encontraron "oculta" bajo una escalera -en la que fueron localizados- una manta y, dentro de ella dos escopetas y un rifle que "coinciden con los calibres y características de las armas largas intervenidas".
De las tres armas, han señalado que dos de ellas "tienen señalamientos" por distintos motivos en Francia y Portugal, mientras que la tercera presenta "la numeración borrada".
Los siete detenidos, de los cuales cuatro cuentan con antecedentes por distintos motivos, pasarán a disposición judicial previsiblemente a lo largo del día de mañana.
La investigación continúa abierta y el juzgado de Guardia lleva a cabo las gestiones para llegar al pleno esclarecimiento de lo ocurrido, han concluido dichas fuentes.