Así lo revela el primer informe ‘La seguridad en hogares y negocios’, del recién inaugurado Observatorio Securitas Direct, que también realiza un estudio sobre la percepción de la seguridad de los países de Europa y Latinoamérica en los que opera la compañía, así como en los hábitos y comportamientos de seguridad de España.
En su primer informe, el observatorio señala que el patrón horario refleja una mayor concentración de intrusiones en las horas de mayor oscuridad del día en aquellas en las que hay ausencias. De la 1.00 a las 5.00 o a última hora del día entre las 19.00 y las 22.00 horas todos los días de la semana son las franjas horarias con mayor número de intrusiones. En cambio, de 5.00 a 8.00 horas es cuando menos incidencias se registran.
Otro de los momentos destacados para las intrusiones son los viernes de 20.00 a 22.00 horas. Durante el día, los lunes de 9.00 a 11.00 de la mañana se registran un número alto de intrusiones.
Para la elaboración del informe, la compañía se ha basado en el número de saltos de alarmas reales e intrusiones por zona atendidas durante 2022 por la Central Receptora de Alarmas (CRA) de Securitas Direct, que recibe las señales de los 1,8 millones de alarmas conectadas a las que la compañía da servicio en España.
El informe también apunta que el 91% de los españoles tiene preocupaciones respecto a la protección de su hogar. Además, los robos son el principal factor de preocupación entre la sociedad, ya que dos de cada tres españoles afirman tener inquietud ante ellos.
En lo que respecta a las técnicas de robo más utilizadas en las intrusiones en viviendas, el Observatorio Securitas Direct apunta que los intrusos utilizan herramientas básicas y aprovechan descuidos de los propietarios. Además, suelen ser poco organizados y muy hábiles para escalar o saltar vallas.
En cuanto a los métodos más utilizados en caso de intrusión por tipología de vivienda, se detectan dos modos de actuación principales. En chalets y villas, los ladrones trepan por las fachadas o vallas, que cortan con tenazas para acceder por ventanas, azoteas y balcones. En lo que respecta a pisos y apartamentos, el método más común es forzar la cerradura.