Una mujer de 70 años falleció en la residencia de ancianos de Zaragoza donde vivía después de que se le incendiara el pelo, que había peinado con laca, posiblemente por la chispa del mechero o del cigarrillo que había encendido.
El suceso tuvo lugar a media mañana del miércoles cuando la mujer, «completamente válida» salió al exterior de la residencia del Grupo Vitalia, en la localidad zaragozana de Cadrete, para tomar el sol y el aire y fumar. "La vimos ardiendo y nos sorprendió la voracidad de las llamas y la combustión tan rápida", describió el director de operaciones del Grupo Vitalia, Antonio Morales, quien relató que rápidamente intentaron sofocar el fuego que alcanzaba la cabeza y el tronco de la residente.
Lograron apagar las llamas, pero las heridas de la mujer «eran considerables» y tras avisar a los servicios de emergencia una ambulancia la trasladó al Hospital Miguel Servet, donde falleció sobre las 16:00 horas.
Hasta el lugar del suceso también se desplazaron agentes de la Guardia Civil que investiga los hechos abiertos una investigación, mientras que el Grupo Vitalia ha mostrado su total disposición a colaborar.