Sevilla se mantiene como uno de los pilares fundamentales del socialismo en el país, y también en Andalucía, tras alzarse con cinco de los doce diputados en liza, aunque no ha conseguido ganar en la capital, que continúa siendo bastión del PP, si bien los populares han descendido más de un 14 por ciento en sus apoyos frente a los ocho puntos que descienden los socialistas.
El panorama político sevillano, a pesar de seguir siendo socialista, se abre a los partidos emergentes, otorgándole dos diputados tanto a Podemos como a Ciudadanos, mientras que ha visto desaparecer la representación de Izquierda Unida. Así las cosas, el PSOE ha obtenido, con el 95% del voto escrutano, el 33,9% de los votos, frente al 41,7% que consiguió en las elecciones generales de 2011, con lo que pierde uno de sus diputados, pasando de los seis a los cinco de estas elecciones.
El PP, por su parte, consigue un 25,2% de los votos, frente al 38,68% que registró en el 2011, y desciende en dos el número de sus diputados, pasando de cinco a tres. La caída de los populares en la provincia, muy acentuada en algunas localidades, supera los 13 puntos y los 150.000 votos menos.
El escaño que pierde el PSOE, los dos del PP más el de Izquierda Unida, que no consigue mantener el escaño por la provincia, se lo reparten las dos fuerzas emergentes, Podemos y Ciudadanos, que irrumpen con fuerza en su primera cita electoral a nivel estatal.
Así, Podemos consigue alzarse como la tercera fuerza más votada con casi 200.000 votos y un 18,9% del apoyo de los electores, con lo que alcanza los dos diputados.
Como cuarta fuerza se consolida Ciudadanos, que con algo más de 133.000 votos y un apoyo que ronda el 13% consigue los dos diputados por Sevilla.
Grandes localidades
Los grandes municipios, a excepción de la capital, han sido el verdadero sostén de los socialistas, con una caída generalizada del apoyo hacia el PP con respecto a los comiciones de 2011. Así, en Dos Hermanas se mantiene el PSOE como fuerza más votada pero irrumpe con fuerza Podemos, que se coloca en segundo lugar por delante del PP, situación que se repite en Alcalá de Guadaíra y en La Rinconada.
En Utrera, Mairena del Aljarafe, Écija y Los Palacios y Villafranca son los socialistas los más votados, seguidos de los populares, y también muy de cerca por Podemos en todos los casos. En Los Palacios, el PP cede la primacía que consiguió en 2011 en favor del PSOE, al igual que ha ocurrido en Mairena del Aljarafe y en Écija.
La capital, del PP
Aunque los primeros datos del escrutinio parecían indicar que los socialistas iban a conseguir recuperar la plaza de la capital hispalense, no ha sido así y los sevillanos le han vuelto a dar su apoyo a los populares, eso sí, con una pérdida de apoyos que roza los 14 puntos.
Así, el PP ha vuelto a ser la lista más votada con un 30,1% de apoyos, frente al 44,28% que consiguió en 2011, una caída que ha sido menor para los socialistas, que han conseguido un apoyo del 27,36% frente al 36,35% de hace cuatro años, una caída de más de nueve puntos.
Los apoyos se han volcado en los partidos emergentes, siendo Podemos la cuarta fuerza política de la ciudad, con un 20,3% de los apoyos, seguida, aunque de lejos, por Ciudadanos, con un 13,9% de los votos, y de Izquierda Unida, relegada a la quinta posición en la ciudad y con un 4,85% de apoyos, casi dos puntos menos.
Por distritos, el PP ha sido el partido más votado en la gran mayoría, a excepción de Cerro Amate, Este-Alcosa-Torreblanca, Macarena y Macarena Norte, manteniéndose un equilibrio en los distritos históricos de cada uno de ellos, aunque en algunos de ellos se han alzado con fuerza los partidos emergentes.
Así, Podemos se ha convertido en la segunda fuerza en distritos tan dispares como Casco Antiguo, Cerro-Amate, Este-Alcosa-Torreblanca y Macarena Norte, mientras que Ciudadanos irrumpe como segunda fuerza política en los distritos de Los Remedios y Nervión, ambos con mayoría popular.
Como curiosidad, tanto a nivel provincial como de la capital hispalense, podemos destacar la desaparición casi absoluta de UPyD, que fue la cuarta fuerza política en las pasadas generales, y la irrupción y con mucha fuerza del Pacma, el Partido Animalista, que ha conseguido en la provincia alcanzar el 0,91% de los sufragios.