'Vinnell-Brown & Root Spain' (VBR), la sociedad que gestiona los servicios civiles de la base aérea de Morón de la Frontera (Sevilla) para las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos en Europa, acometerá la próxima semana "todos" y cada uno de los 55 despidos incluidos en el nuevo expediente de regulación de empleo (ERE) promovido por la compañía, según ha informado a Europa Press José Armando Rodríguez (UGT), presidente del comité de empresa de VBR. Con estos 55 nuevos despidos, serán 240 los puestos de trabajo estables destruidos por la empresa mediante los tres ERE acometidos desde 2010.
"Nos han dicho que los despidos comenzarán la semana que viene y serán realizados los 55 con indemnizaciones de 20 días de sueldo por año de servicio y un máximo de 12 mensualidades", ha dicho el presidente del comité de empresa, quien tras finalizar sin acuerdo el periodo de consultas del ERE opina que este nuevo despido colectivo, el tercero que acomete VBR desde 2010, pone de manifiesto que en la base de Morón, cuyo uso comparten España y Estados Unidos, "quienes mandan son los americanos".
Y es que mientras el ERE se fundamenta en la desaparición de los servicios de abastecimiento de combustible, carga y descarga y parque móvil en el contrato licitado por las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos en Europa para la gestión de estas instalaciones militares, el comité avisa de la creciente actividad militar en el aeródromo y de la paulatina sustitución de los trabajadores españoles por militares estadounidenses.
EL CONFLICTO DE LA BASE
Como muestran las hemerotecas, la empresa gestora de los servicios civiles de estas instalaciones militares ya promovió a finales de 2010 un primer expediente de regulación de empleo "por causas organizativas", para extinguir 286 de los 594 puestos de empleo sujetos entonces a tales servicios. Durante la negociación, la compañía y el comité de empresa acordaron reducir a 150 el número de despidos, pero la destrucción de puestos de trabajo quedó después rebajada a 119 personas al ser descubierto que 31 de los trabajadores incluidos en el ERE habían causado ya baja en la empresa, extremo que por cierto investiga el Juzgado de Instrucción número 15 de Sevilla.
Ya en 2013, un año en el que Estados Unidos decidió ampliar su presencia militar en la base de Morón de la Frontera con el despliegue de 500 infantes de marina y ocho aeronaves, la empresa promovió un nuevo ERE. En esta ocasión no medió acuerdo alguno y en septiembre, 'VBR' consumó el despido de otros 66 trabajadores, toda vez que pocos meses después, Estados Unidos ampliaba aún más su presencia militar en Morón para sumar 850 infantes de marina y 17 aeronaves en estas instalaciones.
EL TERCER ERE
Los trabajadores de la base, en ese sentido, avisaban de una estrategia predeterminada para reducir la plantilla española de las instalaciones castrenses y sustituir así a los empleados españoles por personal estadounidenses o directamente marines. Ya entonces, los representantes de la plantilla manifestaban su temor ante la posibilidad de que VBR promoviese un tercer ERE para que, en conjunto, los despidos colectivos se acercasen al número de puestos de empleo que la empresa pretendía extinguir a través del primer expediente de regulación de empleo, es decir 286.