Los carriles bus de la ciudad ya cuentan con la señalización reglamentaria para permitir la circulación de motocicletas y vehículos eléctricos por los mismos, según ha informado en un comunicado el Ayuntamiento de Sevilla.
Esta actuación se une a las obras de ampliación de los carriles bus de la ciudad, iniciadas en junio y recientemente finalizadas, que han supuesto "pasar de los 17,1 kilómetros inicialmente existentes a un total de 46,4 kilómetros", esto es, un incremento del 271 por ciento, según ha indicado el delegado municipal de Seguridad y Movilidad, Demetrio Cabello.
"El objetivo de este plan es conseguir un más rápido y mejor servicio para los usuarios, al ganar en velocidad comercial, rebajando también los costes de explotación", ha afirmado Cabello, quien ha apuntado que "la ampliación de la red de carriles bus ha permitido aumentar la velocidad media de la red en un tres por ciento, al pasar de 12,4 a 12,8 kilómetros por hora". Asimismo, señala que "esta mejora de la velocidad comercial supone un ahorro para los usuarios de casi 1.800 horas diarias o 480.000 horas al año".