El concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Sevilla, el popular Juan de la Rosa, ha negado este miércoles que
el documento de aprobación definitiva de la debatida limitación municipal a las viviendas de uso turístico, a votar este jueves en el pleno con su previsible aprobación al haber cosechado el PP el apoyo de
Vox, "abra la puerta a 23.000" viviendas más de esta naturaleza. "Como mucho llegará a 7.000 viviendas, porque
hay que ajustar todo lo que tenemos encima de la mesa", ha dicho.
En unas declaraciones difundidas por el Ayuntamiento hispalense, De la Rosa ha manifestado que
tras la previsible aprobación del documento definitivo de la norma en el pleno ordinario de este jueves, "Sevilla será la
primera ciudad andaluza en limitar las viviendas de uso turístico" tras la entrada en vigor a comienzos del pasado mes de marzo del decreto de la Junta de Andalucía que habilita a los municipios para
adoptar medidas de este tipo.
En ese sentido, ha reconocido el "gesto responsable" de Vox al
anunciar su apoyo al texto final, después de que en el pleno de junio
no prosperase el documento definitivo de la regulación promovida por el Gobierno local para limitar a un máximo del diez por ciento sobre el total,
el número de viviendas turísticas en cada uno de los 108 barrios de la ciudad; al
votar en contra la oposición al completo, PSOE, Vox y Podemos-IU, que alegaban entre otros aspectos la no inclusión de sus aportaciones, la demanda de una regulación más dura y
una suspensión temporal de las autorizaciones de obras para pisos y apartamentos turísticos.
Ya en julio, el Gobierno local en minoría del PP esgrimía
un nuevo documento que incorporaba a la regulación la revisión del número máximo de pisos turísticos en las zonas de 'alto esfuerzo familiar' --donde
se invierte más del 30% del sueldo en la vivienda--, en las zonas acústicamente saturadas y las patrimoniales; así como
una revisión trimestral de los porcentajes de viviendas turísticas respecto a las residenciales.
De nuevo que no
No obstante, tras
elevar el PP el documento por vía de urgencia al consejo de gobierno de la Gerencia de Urbanismo, los grupos de oposición, PSOE, Vox y Con Podemos-IU, se abstuvieron a la propuesta de debate urgente, que decayó al
no contar con mayoría absoluta, insistiendo en reclamar una norma más dura y la
suspensión temporal de autorizaciones.
Al respecto, De la Rosa ha lamentado que en junio "la oposición se descolgase" con su rechazo a esta norma que
había contado con su apoyo en la votación inicial, defendiendo las "negociaciones" promovidas por
el Gobierno local del PP para superar esta situación.
Fruto de la norma, según ha destacado,
pesará un límite del diez por ciento para las viviendas de uso turístico con relación al total de viviendas en las zonas consideradas como
"saturadas", como el casco histórico y Triana, donde merced a las que ya funcionan no será autorizada "ni una vivienda turística más".
"Frenar en seco en las zonas saturadas"
La medida contará con "revisiones paulatinas cada tres meses y una mesa de seguimiento,
más control e inspección y muchas medidas complementarias con la Junta", como "primer paso para poner pie en pared y frenar en seco" el
crecimiento de las viviendas turísticas en las "zonas saturadas".
Y mientras el PSOE y Podemos-IU avisan de que
la norma permitiría la instalación de "casi 23.000" nuevas viviendas turísticas más en las zonas de Sevilla no consideradas como saturadas, especialmente en los barrios que rodean al casco histórico, De la Rosa ha asegurado que
"bajo ningún concepto" se alcanzará esa cifra, señalando que los informes que baraja el gobierno local apuntan a que "
como mucho se llegará a 7.000, porque hay que ajustar todo lo que tenemos encima de la mesa".
También con relación a las peticiones de dichos grupos,
ha esgrimido un informe de la Gerencia de Urbanismo según el cual con relación a las viviendas de uso turístico, "el Servicio de Licencias e Inspección Urbanística
tramita las correspondientes licencias y declaraciones responsables, las cuales tampoco pueden suspenderse ya que las mismas son el
reconocimiento de un derecho de carácter urbanístico; declarando el informe que "el Ayuntamiento de Sevilla no tiene la potestad para establecer moratoria o prohibición alguna, al
efecto de las inscripciones de Viviendas de Uso Turístico en el Registro de Turismo de Andalucía".