Fue el propio Manuel Chaves el que anunciaba en una visita política a Rota el 21 de octubre, en plena campaña electoral que estaba "dispuesto a recibir a la alcaldesa". Sin embargo, y a pesar de que desde la Alcaldía, el 25 de octubre se enviara la primera solicitud de reunión, a la que le han sucedido otras cartas enviadas el 14 de noviembre y el 19 de diciembre, "no se ha recibido noticia alguna desde la Vicepresidencia del entonces Gobierno", algo que para la primera edil "no se merece la ciudad", y que tanto el pueblo como el Ayuntamiento, a través de distintos acuerdos plenarios apoyados por todos los grupos políticos, han solicitado "que se vea reconocido su papel, después de más de 50 años con un tercio de su término municipal ocupado por la Base Naval, que además con su incorporación al escudo antimisiles de la OTAN aumenta su uso e importancia".
María Eva Corrales ha mostrado su "decepción, aunque no su sorpresa", porque Manuel Chaves haya incumplido su palabra de recibir a la primera autoridad de Rota y los portavoces, y escuchar las reivindicaciones del municipio. Para la alcaldesa, este gesto del ahora ex vicepresidente "demuestra su falsa defensa de los intereses de Rota con respeto a la Base en los años que ha estado en el Gobierno de la Nación en los que no se han cumplido los compromisos que expresaba hace unos años. Unos compromisos adquiridos tanto con los trabajadores de la Base Naval de Rota en asuntos como el mantenimiento de puesto de trabajo en las instalaciones militares, o la pérdida de poder adquisitivo de estos trabajadores; como con las reivindicaciones de servidumbre militar, que según un estudio encargado por el Ayuntamiento de Rota entonces gobernado por el PSOE, se cifraba en 3,6 millones de euros anuales, y las de pago de impuestos como el IBI, -en el que han recurrido todas las compensaciones efectuadas por este Ayuntamiento-, o el ICIO".