“En Santa Rita viven 11 personas de entre 70 y 94 años que tienen que enfrentarse con los inconvenientes de no tener adaptada la calle a sus necesidades".
A San Fernando le queda mucho para ser una ciudad accesible. Esta afirmación la constatan miles de isleños que encuentran en su día a día barreras infranqueables que limitan su libertad de movimientos.
La concejal de Partido Popular, Malu del Río, ha denunciado una de estas situaciones, la que sufren los vecinos de la calle Santa Rita y cuya falta de accesibilidad “deberían abochornar al Gobierno de Patricia Cavada por la falta de empatía que demuestra con el colectivo de personas que tenemos algún tipo de discapacidad”.
Acompañada de vecinos que se desplazan en silla de ruedas, Del Río comprobó la necesidad que tiene esta calle de una actuación urgente para eliminar las numerosas barreras arquitectónicas existente. “En Santa Rita viven 11 personas de entre 70 y 94 años que tienen que enfrentarse diariamente con los inconvenientes de no tener adaptada la calle a sus necesidades. Solo queremos que se cumpla la normativa vigente en esta materia”, señaló.
Farolas ubicadas en pleno acerado que impide el paso de quienes tienen movilidad reducida, rebajes en aceras que resultan una auténtica ‘chapuza’ y que se convierten en un obstáculo más; aparcamientos reservados para personas con movilidad reducida que no cuentan con señalización horizontal, son algunas de las deficiencias encontradas en la calle Santa Rita.
“La ciudad que todos queremos se consigue trabajando calle a calle, plaza a plaza, espacio a espacio. La mayor parte de las actuaciones necesarias para que los isleños con alguna discapacidad son fáciles de resolver y económicas, solo hay que tener dos cosas de las que, a la vista está, carece el Gobierno de Patricia Cavada; y que son la empatía con el colectivo y la voluntad política. Nosotros -subrayó la edil del PP- seguiremos denunciando y exigiendo que a todos los ciudadanos se nos trate por igual. No nos queda otra salida”.