La empresa municipal de aguas Emasagra, participada por el Ayuntamiento de la capital e Hidralia, ha reforzado su compromiso con el medio ambiente con el cálculo de las emisiones de gases de efecto invernadero y la adopción de medidas correctoras que reduzcan el impacto ambiental en su actividad en Granada y su Área Metropolitana.
Así, Emasagra elaborará durante los próximos meses un Inventario de Emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI), también conocido como 'Huella de Carbono Empresarial', con la finalidad de conocer y determinar su aportación al calentamiento global del planeta, según ha informado la empresa en una nota de prensa.
Dicha contribución se expresa en toneladas equivalentes de dióxido de carbono, generadas como consecuencia de sus actividades y procesos. El cálculo abarcará todo el ciclo integral del agua, así como las instalaciones de la empresa: sede central de calle Molinos, Redes de Abastecimiento y Saneamiento, Planta Potabilizadora y Plantas Depuradoras.
El objetivo principal del proyecto "no consiste sólo en la obtención de la cantidad total de huella de carbono en un año, sino también el de asignar a cada proceso realizado sus emisiones asociadas, con el fin de establecer un plan de reducción de emisiones que permita disminuir las cifras en años sucesivos".
En pasos posteriores, se solicitará la acreditación correspondiente y, tanto los cálculos a realizar como las consecuentes reducciones de emisiones, serán inscritos en el Registro Nacional de Huella de Carbono del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y en el Sistema Andaluz de Compensación de Emisiones, para dejar constancia "del compromiso y de los esfuerzos realizados por parte de Emasagra para reducir las emisiones de GEI y minimizar su impacto en el cambio climático".
El director-gerente de Emasagra, Federico Sánchez, ha comentado a este respecto que la compañía se compromete así "con el desarrollo sostenible que permita garantizar un futuro mejor para las siguientes generaciones".
