Alrededor de 300 manifestantes, según medios británicos, marcharon este domingo por céntricas calles de Londres para manifestar su rechazo al racismo y la brutalidad policial, a raíz del asesinato de George Floyd en Estados Unidos.
El punto de encuentro fue la entrada de la estación de metro del popular barrio de Notting Hill, coincidiendo con la celebración virtual del famoso carnaval del mismo nombre, que otros veranos discurre por esas calles y que ahora se lleva a cabo íntegramente online debido a la pandemia.
De hecho, parte de la ruta seguida por los activistas es la que habitualmente se sigue en el tradicional carnaval.
Al inicio de la protesta, algunos manifestantes se tumbaron en la carretera, bloqueando el tráfico, con mensajes como "el Reino Unido no es inocente", antes de comenzar a marchar en dirección a Hyde Park.
Entre algunos de los cánticos escuchados, los congregados gritaban: "¿Las calles de quién? Nuestras calles", "este es el aspecto de la democracia" y "esto es un movimiento, no un momento".
El número de manifestantes osciló en unos 300, según estimaciones de los medios locales, que entonaron el tema "Redemption" de Bob Marley al tiempo que los activistas levantaban el puño.
La activista Sasha Johnson, una de las organizadoras de la marcha confió en que este movimiento "empodere a la comunidad".
"Nuestro mensaje es: escucha, oye nuestras palabras. Queremos un cambio sostenible y tangible", indicó.