Putin declaró a la televisión pública rusa que Lukashenko le había pedido ayuda después del estallido de las protestas postelectorales
El Consejo Coordinador Opositor de Bielorrusia condenó hoy el anuncio del presidente ruso, Vladímir Putin, sobre la creación de un contingente policial especial para intervenir en la antigua república soviética en caso de necesidad.
"El consejo coordinador considera inadmisible la creación de formaciones armadas en territorio ruso o de cualquier otro Estado con el fin de ser utilizadas en territorio bielorruso. Esto contradice el derecho internacional y la posición de la sociedad bielorrusa", señalaron los opositores en un comunicado citado por el portal AFN.by.
Los opositores lamentaron que Rusia haya conformado una reserva de agentes del orden para ser utilizados en Bielorrusia a solicitud del presidente, Alexandr Lukashenko, quien debería "ser el garante de la Constitución".
El consejo coordinador acusó de incoherencia al mandatario bielorruso, quien anteriormente "declaró en reiteradas ocasiones que la injerencia externa en los asuntos internos de Bielorrusia era inadmisible".
"Los mecanismos de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva deben ser activados exclusivamente en caso de una invasión armada. No vemos que en Bielorrusia existan condiciones para que la situación se descontrole", indicaron los opositores, al recordar que las protestas que sacuden al país son "exclusivamente pacíficas".
Además, el consejo insistió en que rechaza la injerencia externa en los asuntos internos del país y declaró que "no recibirá ninguna ayuda procedente del extranjero".
"Pedimos a todos los socios extranjeros abstenerse de declaraciones o cualquier representación de los intereses de la sociedad bielorrusa, de cualquier ayuda al consejo coordinador u organización semejante", añadieron.
El consejo aseveró que "no aceptará ninguna ayuda extranjera y no participará ni directa ni indirectamente en su distribución".
"Solo el diálogo interno propiciará la solución a la crisis política" del país, concluyeron los opositores.
En sus primeras declaraciones sobre los sucesos en Bielorrusia, Putin declaró a la televisión pública rusa que Lukashenko le había pedido ayuda después del estallido de las protestas postelectorales.
Putin acordó con Lukashenko la formación de dicha unidad, aunque ambos coincidieron en que actualmente no se dan las circunstancias para su despliegue.