El 45,4 % de las personas contagiadas, unas 96.948, ya se recuperó y recibió el alta
Argentina superó los 4.000 fallecimientos por la COVID-19, al sumar este miércoles 30 nuevos fallecimientos y llegar a un total de 4.009, con 213.535 personas infectadas desde la irrupción de la pandemia de coronavirus en el país.
De las 30 muertes que se notificaron en las últimas doce horas, 24 se produjeron en la provincia de Buenos Aires, el principal epicentro de la pandemia donde se concentra el 60,6 % de todos los casos a nivel nacional, informó el Ministerio de Salud en su reporte matutino.
En tanto, otras dos personas murieron por el virus SARS-CoV-2 en la ciudad de Buenos Aires, otras dos en Neuquén (sur), una en el Chaco (noreste) y otra en Santa Fe.
El Ministerio de Salud indicó que Argentina registra un índice de letalidad del 1,9 %, con una tasa de mortalidad por el virus SARS-CoV-2 de 88 personas por cada millón de habitantes, con una edad promedio de los fallecidos de 75 años.
Por otra parte, 1.207 personas se encuentran internadas en terapia intensiva, una cifra que las autoridades siguen con detenimiento ante el riesgo de saturación del sistema sanitario, que actualmente registra una ocupación del 56,6 % a nivel nacional y del 66,4 % en el área metropolitana de Buenos Aires (AMBA), la región que agrupa la capital y la populosa periferia que pertenece a la provincia de Buenos Aires.
El 45,4 % de las personas contagiadas, unas 96.948, ya se recuperó y recibió el alta.
PREOCUPACIÓN POR AUMENTO DE CASOS EN LAS PROVINCIAS
El aumento de casos en el interior del país, con la aparición de transmisión comunitaria en zonas donde no se habían registrado antes contagios, preocupa cada vez más a las autoridades, que reiteraron su llamado a ejercer "la responsabilidad individual" para frenar la cadena de transmisión del virus.
Distintas provincias registran focos crecientes de contagio, entre ellas Jujuy, Río Negro, Mendoza, Santa Fe, Córdoba y Santa Cruz.
La secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, advirtió hoy del "aumento sostenido de casos allí donde no había y no se controlaban los brotes por conglomerado (grupo cerrado)".
Las reuniones sociales, prohibidas en todo el país desde el lunes pasado, son la principal causa de contagio, señaló la funcionaria, porque en espacios cerrados y con gente conocida "es instintivo el acercamiento".
"Si no se cumplen las recomendaciones, las posibilidades de experimentar lo que viven otras provincias es grande", alertó Vizzotti durante el reporte.
El presidente argentino, Alberto Fernández, extendió las medidas de aislamiento -que varían según la situación sanitaria de cada región- hasta el próximo 16 de agosto.
El área metropolitana de Buenos Aires, la región más poblada del país con cerca de 14 millones de habitantes, se encuentra en cuarentena desde el 20 de marzo.