Al menos 66 personas han muerto y 60 están desaparecidas, según las últimas cifras de los cuerpos de seguridad
Los equipos de emergencia de Japón continúan las labores de rescate y la búsqueda de decenas de desaparecidos por las inundaciones y derrumbes causados por la lluvia torrencial en la mitad sur del país, que dejan más de medio centenar de muertos.
Al menos 66 personas han muerto y 60 están desaparecidas, según las últimas cifras de los cuerpos de seguridad recogidas a las 15.00 hora local (06.00 GMT) por la cadena pública japonesa NHK.
Se teme que el número aumente con el paso de las horas, mientras continúan las labores de salvamento y los cuerpos médicos confirman el estado de aquellos hallados en parada cardiorrespiratoria.
Los servicios de emergencia han recibido más de un centenar de llamadas alertando de coches que han sido arrastrados por las aguas y otro tipo de accidentes, explicó el ministro portavoz del Gobierno nipón, Yoshihide Suga, en una rueda de prensa recogida por NHK.
Las lluvias torrenciales que comenzaron este jueves han dejado precipitaciones récord en varias zonas y mantienen en alerta a 18 de las 47 prefecturas del archipiélago por el riesgo de desbordamientos de ríos, inundaciones y desastres relacionados con deslizamientos y derrumbamientos de tierra.
La prefectura de Hiroshima (oeste) es junto a la de Ehime (oeste) en la que más víctimas se han contabilizado, según el citado medio.
Un equipo de 54.000 personas, entre soldados de las Fuerzas de Autodefensa (ejército), policías y bomberos, participan en los rescates, para los que se han desplegado 41 helicópteros, detalló Suga tras una reunión del gabinete de emergencia.
El primer ministro nipón, Shinzo Abe, tildó de "carrera contra el tiempo" las labores de salvamento, y ordenó priorizar los rescates y evacuaciones para evitar más daños, recogió la agencia local Kyodo.
Las autoridades han ordenado o recomendado la evacuación de más de cuatro millones de personas en la región sudoeste del país.
Los medios locales continúan hoy retransmitiendo imágenes de localidades anegadas por las aguas, casas sepultadas en barro y de los cuerpos de salvamento durante los rescates.
En la prefectura de Okayama, los trabajos de salvamento se prolongaron durante la noche para ayudar a las cientos de personas atrapadas en los tejados de sus viviendas, donde subieron para huir de las inundaciones y desbordamientos fluviales.
Japón no vivía un desastre así desde agosto de 2014, cuando 77 personas murieron en Hiroshima por lluvias torrenciales.