La Policía israelí ha disuelto este viernes con gases lacrimógenos varias manifestaciones celebradas en Cisjordania en el marco de la Marcha Global a Jerusalén, celebrada con motivo de la conmemoración del 46 aniversario de la 'Naksa' (Revés), que marca la victoria del Ejército israelí en la guerra de 1967 y la ocupación de los territorios palestinos.
En la localidad de Al Maasara, ubicada cerca de la ciudad cisjordana de Belén, varios participantes han sufrido intoxicación por inhalación de gases lacrimógenos disparados por agentes israelíes.
Durante la protesta, los presentes han portado banderas palestinas y fotos de los presos palestinos y de los fallecidos en ataques israelíes, según ha informado la agencia palestina de noticias Maan.
Por otra parte, decenas de manifestantes han sufrido también intoxicación por inhalación de gases lacrimógenos en las manifestaciones celebradas en las localidades de Bilin y Kafr Qaddum.
El miércoles, el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, recalcó que el pueblo palestino "nunca abandonará su derecho a hacer de Jerusalén la capital de su Estado", durante su discurso de conmemoración de la 'Naksa'.
"En este mismo día, hace 46 años, Jerusalén fue ocupado por Israel, que inició un proceso para cambiar su carácter geográfico y demográfico a través de la demolición de viviendas, la construcción de asentamientos y la falsificación de hechos, nombres y personajes", agregó.
El mandatario palestino indicó que, pese a ello, las políticas israelíes "no han afectado la determinación del pueblo palestino de mantener Jerusalén como su capital eterna". "No habrá paz sin Jerusalén, no habrá estado sin Jerusalén y no habrá estabilidad sin Jerusalén", apuntó.
Por su parte, la dirigente de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) Hanan Ashrawi manifestó que "46 años más tarde, la ocupación israelí del 22 por ciento de la Palestina histórica continúa y constituye un desastre político y humanitario que domina y controla las vidas del pueblo palestino, tanto en Palestina como en el exilio".
"Ha llegado el momento de poner fin a esta injusticia histórica con el pueblo palestino. El mundo ha de asumir sus responsabilidades políticas, legales y éticas y hacer a Israel responsable de sus violaciones del Derecho Internacional y del Derecho Humanitario", añadió.
Por su parte, el negociador jefe palestino, Saeb Erekat, indicó que "nada ha cambiado en 46 años", al tiempo que ha añadido que "la 'Nakba' (Desastre) continúa". La 'Nakba' es el término por el que se recuerda el éxodo palestino y la creación del Estado de Israel hace exactamente 65 años, en 1948.
"Desde que comenzó la ocupación, el destino de las localidades ocupadas se mantiene. ¿Por qué desplazan estas localidades? ¿Por qué destruyen el Barrio Marroquí de Jerusalén? ¿Por qué construyeron el muro? Quieren dictar las fronteras", remachó Erekat.