La Hermandad de Bondad y Misericordia espera poder celebrar sus cultos cuaresmales en la parroquia de San Juan de Dios, con cuya comunidad viene ya trabajando en estos últimos meses. De este modo la joven cofradía empezaría a normalizar su situación, si bien debería trasladar a su titular a la iglesia de la Victoria para realizar su salida procesional dado que la parroquia de San Juan de Dios no dispone de una puerta del tamaño necesario para hacerlo.

El nombramiento de Manuel Barrera como copárroco de San Juan de Dios y director espiritual de la hermandad está contribuyendo a esa ansiada normalización. Además, la cofradía recibió días pasados el anuncio desde el Obispado de que la cesión de una parcela anexa a la parroquia está ya prácticamente cerrada a falta de unos trámites administrativos.

Todo ello viene a despejar el futuro de una corporación que empieza a pensar ya en su próxima incorporación a la nómina de cofradías que hacen estación de penitencia a la Catedral. Bondad y Misericordia ha cumplido ya el periodo mínimo de cinco años procesionando en las vísperas de la Semana Santa, por lo que se encuentra en disposición de solicitar esa incorporación, si bien no lo ha hecho hasta ahora por carecer de una sede estable. Cuando llegue el momento -que no ha de tardar ya demasiado- la hermandad solicitará a la Unión de Hermandades su inclusión en la jornada del Domingo de Ramos, que pasaría a tener siete cofradías en el supuesto de que el Consejo atendiese esta demanda.

El Consuelo, a Las Viñas

La Hermandad del Consuelo, que es otra de las beneficiarias de la permuta de terrenos entre el Ayuntamiento y el Obispado, se prepara ya para vivir su última Cuaresma y Semana Santa en la capilla que habilitó hace unos años en la Ronda del Pelirón. Una vez amarrada la cesión de una parcela de unos 500 metros cuadrados de superficie, la cofradía tiene claro que su futuro pasa por la construcción de una capilla propia en el entorno de Chapín. La idea es trasladarse a la parroquia de las Viñas finalizada la Semana Santa a la espera de que el nuevo templo se convierta en una realidad. De este modo evita el gasto que le supone hacer frente al alquiler mensual del local que fue habilitado como capilla y en el que se encuentran al culto sus imágenes titulares.

El Soberano Poder  se volcará en su casa

La Hermandad del Soberano Poder está cerca de acceder a un solar de la calle Huelva próximo a la parroquia de La Granja. Una vez que se firme la cesión del terreno, la cofradía tiene claro que dejará en suspenso el resto de proyectos en los que viene trabajando para hacer frente al coste que supondrá levantar su casa de hermandad. El primer objetivo es habilitar un salón de pasos que evite el abono del alquiler mensual de la nave que hace ahora las veces de almacén. A partir de ahí se seguirá trabajando para culminar un proyecto que se antoja clave para el desarrollo de la actividad diaria.