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Jerez

Una pletórica Rozalén ‘desborda’ el Villamarta

La cantautora alzó su voz contra la violencia machista y la falta de empatía para contarle y cantarle a la vida en una noche rica en historias y buena música

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  • Rozalén al inicio del concierto. -
  • La cantautora y compositora, que actuó en plena crisis del Villamarta en noviembre 2016, mostró su alegría por volver a pisar el coliseo jerezano

Rozalén volvía a Jerez con todo vendido desde hace semanas. Su emoción al regresar a las tablas del gran teatro Villamarta la noche del sábado para presentar su tercer disco, ‘Cuando el río suena…’ era doble y se le  notó desde el primer momento, cuando abrió el concierto con su “Puerta Violeta”,  su canto contra la violencia machista, a la que seguía otro tema cargado de esperanza y optimismo, “Vivir”, un canto a la vida, con una letra inspirada en las mujeres que luchan contra el cáncer de mama.

Empezaba fuerte y feliz por la calurosa bienvenida que le volvía a brindar el público de Jerez “desde el minuto cero” y por hacerlo en unas circunstancias mucho más tranquilas para el coliseo jerezano. “La última vez (dijo por su concierto del 26 de  noviembre de 2016) estaba la cosa mu tensa porque iban a cerrar este teatro. Nos da muchísimo gusto volver y veros aquí”. Era su saludo al público y a esta tierra, con la que espera tener una “historia larga”, y visto los aplausos y cómo se entregó durante las dos horas y media de concierto, demostrando que además de una de las mejores cantautoras del momento, es una showman en toda regla, el idilio con Jerez promete.

Agradecida por elegirla a ella en plena final de Champions y en un fin de semana ‘trompetero’, la cantautora albaceteña empezó a contar y cantar con su dulce y a la vez tan desgarradora voz las historias que ha plasmado en el que está considerado como el disco más intimista de su carrera, con su tío Justo, su abuela, sus padres y Letur, el pueblo de Albacete donde se crió, como protagonistas. La reivindicación de sus letras siempre estaba presente a la hora de denunciar otra de las grandes enfermedades del mundo “la falta de empatía” y los “prejuicios” de los que se contamina el ser humano.

En esos y otros momentos desnudó su alma, como también hizo cuando entonó “La que baila para ti”, la historia de una ruptura sentimental “que a los cantautores nos da para mucho”. Pero es que dos horas y media dan para mucho, y sobre el escenario no faltaron los mariachis y el buen rollo con una anfitriona de lujo que fue ‘de más a más’, subiendo al escenario a cantar a “Las hadas existen” a los niños que acudieron a verla. Hasta una veintena de pequeños la acompañaron y se animaron a cantar con ella.

Tampoco faltaron sus versiones, como la de ‘Volver a los 17’ de Violeta Parra, donde regaló otro de los momentos mágicos de la noche, ni los éxitos con los que esta compositora dejó sus conciertos en bares para permitir a todos disfrutar de su música de autor con“80 veces”, “Comiéndote a besos” y “Saltan chispas”, con el que recorrió el patio de butacas de punta a punta.

Para la despedida sonaba “Girasoles”, que ya se ha convertido en todo un himno para homenajear  a la gente buena, mientras una Rozalén pletórica y acompañada por su inseparable Beatriz Romero, intérprete de lengua de signos, y la responsable de que su música llegue a todo el mundo, agradecía a los presentes que una vez más le hicieran feliz, permitiéndoles “contar y cantar” sobre el escenario sus historias, sin duda, como dijo “el mejor regalo”, pero no sólo para ella.  

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