Se buscará conocer si la incidencia del cáncer se debe a una industria o actividad en concreto
La sesión parlamentaria de ruegos y preguntas ha contado con información relevante sobre el estudio epidemiológico que el Gobierno realizará para determinar si la zona está expuesta a un contaminantes que incrementan el riesgo de padecer cáncer.
En respuesta a varias cuestiones presentadas por el portavoz de la oposición, Fabian Picardo, el ministro de Medio Ambiente y Turismo, Ernest Britto, respondió que aunque el estudio se enfocará en el Peñón, será determinante ampliar el marco de investigación para conocer con precisión los riesgos de todo el área en general.
Recordaba el ministro Britto que la oferta que había ganado el concurso para la realización de este estudio era la de del Instituto de Investigación Medioambiental nacional de la Universidad de Aarhus, en Dinamarca. El Gobierno lo describió como la institución independiente como el récord más alto en estudios epidemiológicos sobre la incidencia del cáncer.
En su respuesta Britto señala que como en cualquier estudio de este tipo, existen una serie de requerimientos fundamentales, que incluyen la investigación sobre los efectos en la salud de determinados grupos poblacionales y la exposición a supuestas sustancias dañinas. Los dos principales objetivos del estudio serán establecer por un lado si Gibraltar en una comunidad de alto riesgo para el cáncer, debido a su localización dentro de un área de potenciales fuentes de contaminación y por otro lado establecer si realmente la incidencia de cáncer existe y es mayor que en otros lugares.
De este estudio se conocerá, destacó el ministro de Medio Ambiente, si existe además una incidencia de mayor riesgo ante ciertos tipos de cáncer y si este riesgo se puede vincular a una actividad o industria en particular.
De la consulta inicial con el Instituto encargado de la investigación, se extrajo que consideran posible completar el estudio en un plazo estimado de 7 meses.
No quiso el ministro detallar el coste del estudio, alegando que de momento se desconocía la cifra exacta al depender de la decisión final.
Sacrificios
En la misma sesión parlamentaria, el Gobierno aseguró que habían reforzado su campaña de cara a reducir la población local de gaviotas, que alcanza los 30.000 animales. En la actualidad existen dos organizaciones, una de ellas del Peñón, trabajando en la reducción de la población.
El ministro de Medio Ambiente, para evitar otra controversia como la vivida el pasado año con relación al sacrificio de monos, rehusó entrar en detalle del número de animales que serán sacrificados. Sí informó sin embargo que el contratista extranjero está trabajando sobre un programa de seis semanas, en las que enfocándose en las áreas de anidación de la zona alta del Peñón, intentarán eliminar el mayor número posible de estos animales.
Con relación a los monos de Gibraltar, Britto y Picardo también protagonizaron un intercambio de palabras sobre el plan de dirección del Gobierno sobre estos animales.
Picardo declaró que las recientes quejas recibidas por parte de la ciudadanía sobre el ruido que causan los monos y los ataques a niños, muestran “que la estrategia del Gobierno ha fallado”, añadiendo que los sacrificios esporádicos “no van a solventar el problema”.
El portavoz de la oposición instó al ministro Britto a invertir dinero en la reubicación de animales y no en el sacrificio.
Por su parte el ministro defendió el plan del Ejecutivo señalando que no es nada nuevo que los monos causan ruido y subrayando que son los humanos los que han hecho que estos animales les pierdan el miedo al alimentarlos continuamente.
Reconoció que el Gobierno estaba preocupado por recientes acontecimientos, pero señaló que se había reforzado el plan de cuidado de estos animales.