Dos gigantescas esculturas de Tío Pepe, de 2,58 metros de altura y 1,40 metros ancho, recibirán y despedirán a los miles de viajeros que transitan por el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas.
En una nota de prensa, González Byass explica que las esculturas están situadas en las tiendas 'Madrid Duty Free' de la Terminal 4 y '4 Satélite'.
"La inconfundible botella humanizada de Tío Pepe, vestida con chaquetilla, sombrero y guitarra, dará un toque especial a la principal puerta de entrada y salida de España hacia el mundo", sostiene.
Desde el 17 de abril, estas esculturas de Gonzalo Martín Munera estarán presentes en el aeropuerto madrileño. Elaboradas a partir de poliestireno expandido, madera y resina de poliuretano, serán "los mejores embajadores en el mundo y protagonizarán un sinfín de instantáneas de los viajeros".
Presente en la actualidad en más de 100 países, este fino de Jerez es uno de los vinos más demandados en los aeropuertos españoles y el más internacional del mundo.