La asociación Mujeres en Igualdad forma parte oficialmente desde este martes del tejido social y asociativo de Jerez. El nacimiento del colectivo cuya secretaria general a nivel nacional es también la senadora del PP Carmen Funes, contó con dos padrinos de excepción, como fueron el secretario general del PP-A, Juan Manuel Moreno, y la alcaldesa de Jerez, María José García-Pelayo. Esta última destacó la trayectoria de este municipio y su “fortaleza” en el asociacionismo, y deseó “larga vida” a las integrantes de esta organización.
Sin embargo, no ocultó el “momento difícil” en el que Mujeres en Igualdad comienza su actividad en Jerez, que coincide con el “bloqueo” por parte de la Junta de Andalucía de “todas las ayudas” en materia de igualdad, salud y juventud. Así lo alertó la alcaldesa, que no ocultó su preocupación tras avisar que este recorte de la Administración andaluza va a suponer un “auténtico problema” para muchos programas que ya están en marcha en la ciudad y que ya contaban con estas prestaciones. A ello hay que sumar también, tal y como agregó, el incremento de la deuda social de la Junta con el Ayuntamiento, que cuantificó en 4,9 millones de euros, cifra esta que está convencida que se “inflará” todavía más.
Para Pelayo, el que el Ayuntamiento destine 14 millones de euros en políticas sociales en su presupuesto para el próximo año “que hoy entra en vigor” (por el martes), frente a los 4 millones que reserva la Junta, evidencia más que nunca la apuesta de una y otra administración respectivamente en políticas sociales.
Funes, por su parte, tiró de estadísticas nacionales en su interés por “terminar con las falsas verdades sobre violencia de género”. Así, apuntó que la violencia de género sobre hombres supone “una mínima parte- del total (con un 29%, frente al 70,1% de mujeres), o que de las 124.920 denuncias presentadas por esta lacra, sólo 22 fueron falsas.
Juanma Moreno, padrino de excepción
Como secretario de Estado de Servicios Sociales e Igualdad entre 2011 y 2014, Juanma tenía claro ayer que “no podía faltar” al acto de constitución de la asociación de mujeres. A ellas se dirigió para hablar de la sociedad machista que hay que erradicar cuando tiró de sus vivencias personales, como las dificultades con las que se topó su madre, Mari, para sacarse el carné de conducir -tuvo que ir a cinco autoescuelas- o expuso el caso de compañeras de trabajo que renunciaron a su proyección profesional por su familia.