La temporada de rebajas no está respondiendo a las expectativas de los comerciantes a pesar de que en la práctica totalidad de los casos se están ofreciendo productos a precios de coste. Tanto Acoje como Asunico justifican esta escasa incidencia de las rebajas en la falta de recursos económicos de los jerezanos, que no tienen dinero para comprar y que, además, tampoco reciben mensajes positivos que animen al consumo.
El presidente de Acoje, Fernando García, admite que se siente “defraudado” con estos primeros días de rebajas. “Tenemos mucho género en las estanterías que hay que echar fuera para poder comprar de cara a la próxima temporada, pero el consumidor no está por gastar. Ya podemos rebajar lo que queramos, que el problema es que no hay dinero”, explicó.
Manuel García, presidente de Asunico, lamenta que el consumo se haya incluso “retraído” en estos últimos meses, porque “la gente está asustada y no gasta”. “El que tiene un duro lo guarda, y el que no tiene que ayudar a un familiar que lo está pasando mal. Todo eso se nota”, advirtió.
Y ello a pesar de que “se están tirando los precios desde un primer momento” debido a que los comerciantes “tienen que coger dinero para poder pagar y seguir comprando”.
El problema con el que se encuentran muchos de estos profesionales es que los ingresos que esperaban obtener en la campaña de rebajas no terminan de llegar, lo que de algún modo les aboca al cierre. “Algunos negocios confiaban en un repunte de la actividad que no se está produciendo, y muchos de ellos acabarán cerrando porque los números no cuadran”, añadió Fernando García.
Con todo, siempre aparecen “nuevos emprendedores” que, ante la “desesperación” que les produce la falta de acceso al mercado laboral, terminan invirtiendo sus pocos ahorros en abrir nuevos negocios. “Todo el mundo sabe cómo está el centro, pero siempre hay quienes se deciden a abrir nuevos locales”, remachó.
Los bares esperan la llegada de los turistas
Los establecimientos hosteleros del centro de la ciudad se muestran algo más optimistas que el comercio. El vocal de Hostelería de Asunico, Francisco Díaz, reconoce que, por el momento, el inicio de la temporada estival transcurre con “tranquilidad”, si bien confía en la llegada del turismo nacional.
“La situación es parecida a la del año pasado, aunque todavía es pronto para hablar. Entre Semana Santa y junio vivimos un poco del turismo extranjero, y ahora lo que solemos recibir es turismo nacional”, explicó. Junio no ha sido un mes especialmente positivo para el sector, pero tampoco malo dada la coyuntura actual.
Según Francisco Díaz, el volumen de ventas decreció alrededor de un 10 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior.
