De hecho, la Policía Nacional tiene indicios suficientes para afirmar que el 8 de abril, la citada organización criminal logró las autorizaciones pertinentes para sacar del puerto de algeciras dos de los tres contenedores que habían sido enviados desde Sudamérica.
Después, dos camiones transportaban los contenedores hasta Alovera (Guadalajara), donde esperaban otros miembros de la organización para extraer la cocaína y realizar de forma inmediata el envío de la droga al norte de España.
El mismo día en que los responsables de la organización se reunían en una casa alquilada de Navalagamella (Madrid) con idea de controlar y supervisar la fase final de la transacción. Una vez que se había constatado la llegada de los contenedores a Alovera, los GEO del Cuerpo Nacional procedieron a la entrada simultánea en la nave y en un domicilio de Madrid, donde cinco personas fueron detenidas y también caían las tres de Alovera.
Las ciudades de Oviedo y Santander también entraron en la ecuación con la detención de otras cuatro personas, completando a los doce integrantes de esta red delictiva. Durante la intervención de la Policía nacional se logró también la intervención de un kilogramos de speed, más de 700.000 euros en efectivo, una decena de vehículos, así como dos pistolas semiautomáticas.
La cocaína venía oculta en una carga legal de polipropileno de alta densidad procedente de Colombia, que estaba oculta en la nave industrial de lo que se camuflaba como empresa de construcción.