El otoño va a traer consigo el
inicio de una de las obras de mayor envergadura de cuantas van a acometerse en el centro histórico, las que conectarán a través de una
plataforma única la zona de Santiago con la de Puertas de Sevilla a través del barrio de San Marcos y la calle Francos.
El
proceso de licitación del proyecto está ya a punto de culminar, toda vez que la Junta de Gobierno local ha aceptado la
propuesta de adjudicación de las obras a la empresa AFC Construcciones y Contratas, por un importe de 1,2 millones de euros (IVA incluido), por lo que en breve se firmará el contrato definitivo.
La
alcaldesa, Mamen Sánchez, ha admitido ya la necesidad de
sentarse con la empresa para planificar la ejecución de los trabajos de modo que afecten en la menor medida posible tanto al tráfico como al desarrollo de la
próxima Semana Santa, ya que este tramo del centro histórico figura en los itinerarios tradicionales de numerosas cofradías.
“Tenemos que priorizar las obras de modo que las menos problemáticas puedan ejecutarse de cara a la próxima Semana Santa. Habrá que hacerlas por trozos, con la ventaja para el tráfico que tenemos muchas vías para desviar la circulación”, explicó.
La propia Mamen Sánchez reconoce que
“todas las obras” que se ejecutan “son incómodas” pero igualmente “bienvenidas”, sobre todo porque “hacía muchísimos años que no se invertía en el centro”.
Hay que recordar que esta actuación
–financiada por los fondos Next Generation de la Unión Europea- va a afectar básicamente a los viales comprendidos entre la Puerta de Sevilla y la Puerta de Santiago, que se sumarán de este modo al concepto de plataforma única que se viene imponiendo en el centro histórico.
En concreto, las obras se extenderán a lo largo y ancho de Rafael Rivero, San Marcos, Padre Rego, plaza de la Compañía, Francos, plaza San Juan, San Juan y Oliva. En una segunda fase se contemplan también actuaciones en el tramo final de la calle Oliva, hacia la denominada Puerta de Santiago; y en Puerta de Sevilla.
El proyecto se concibe por tanto como “obra completa” a pesar de que esas dos últimas actuaciones quedan fuera de esta primera fase de las obras. Para su ejecución total se estima un plazo de 15 meses.
La superficie global afectada por la actuación es de 4.969 metros cuadrados. En una primera subfase se intervendrá en la plaza de San Juan y la calle Oliva, el tramo de Francos abierto a la circulación, la plaza Compañía y la calle Padre Rego; mientras que para la segunda quedarán pendientes las actuaciones de la plaza de San Marcos, la calle San Marcos y la plaza Rafael Rivero.
El proyecto contempla la reordenación y repavimentación completa de los espacios y viales públicos anteriormente descritos. Para ello se diseña una sección de calle en plataforma única sin bordillos y pendientes para la recogida superficial de aguas al centro.
Los pavimentos de las calzadas se realizarán con los adoquines de granito de Gerena existentes o reutilizados que, una vez desmontados, se habrán de limpiar, seleccionar y perfilar para su nuevo uso. En los acerados y zonas peatonales se utilizarán baldosas de granito flameado con distintos despieces de aparejo y formatos, combinados con el empleo de adoquines.