La asamblea general de la entidad aprobó sus cuentas del último año, con unos resultados positivos de 15,1 millones de euros
La asamblea general de Caja Rural de Jaén, Barcelona y Madrid aprobó ayer sus cuentas del ejercicio de 2015, que han vuelto a reafirmar la buena salud financiera de la entidad. La Caja jienense cerró el ejercicio con unos resultados positivos antes de impuestos de 15,1 millones de euros, frente a los 13,2 millones del año anterior. Este aumento se debe, principalmente, al descenso de casi dos puntos de la morosidad, situada en el 7,34% (se pasó de 121 millones en 2014 a los 108 de 2015) cuando la media del sistema financiero supera el 10%. Esta circunstancia motivó que la entidad tuviera que destinar menos dinero a las previsiones por deterioro de activos financieros.
“Las cuentas son satisfactorias porque se producen en un entorno cada vez más difícil y complejo”, señaló el director general de la Caja Rural de Jaén, Enrique Acisclo, antes del consejo rector y la posterior asamblea general que presidió el presidente de la entidad, José Luis García-Lomas. Acisclo admitió las incertidumbres crecientes sobre el sistema financiero –“cada vez es más difícil ganar dinero haciendo banca”, dijo- pero destacó la fortaleza de la Caja Rural. Así, la Caja jienense tiene una solvencia del 15,26%, muy por encima del resto de entidades y del mínimo exigible del 8%. Sus activos financieros se situaron en 722 millones de euros, y la Caja tuvo más de 400 millones en el banco cooperativo, un depósito que, paradójicamente, le penalizó con 6.000 euros mensuales.
A lo largo de 2015, la Caja Rural otorgó 8.700 préstamos y 1.400 créditos, por importe global de 350 millones de euros, un 6% más que en 2014. “Los emprendedores siempre tienen una financiación para sus proyectos”, indicó Enrique Acisclo. El depósito de sus clientes tuvo un crecimiento del 11% y su volumen negociado creció un 25%. La Caja tiene 60.000 cuentas corrientes y 13.000 tarjetas emitidas. Un balance positivo que, Enrique Acisclo, atribuyó a la “política prudente” llevada a cabo en la gestión de la entidad.
Y donde la Caja Rural presume con mayor orgullo es de su independencia y vocación hacia Jaén.”La Caja está implicada con la sociedad de Jaén y apoyando a todos los sectores”, subrayó Enrique Acisclo. Durante 2015 se destinaron casi 4 millones de euros al Fondo e Educación y Promoción. La mayor partida correspondió a la Fundación Caja Rural (1,2 millones) o los 800.000 euros que se destinan al convenio con la Universidad de Jaén.