Ayer comenzaba un Expediente de Regulación Temporal de Empleo para los primeros de los diez trabajadores que se verán afectados durante seis meses y que fue aprobado por la dirección de la Cámara y los trabajadores el pasado mes de agosto tras conocerse el resultado del Plan de Viabilidad. El objetivo es ganar tiempo y no seguir cargando a la entidad con gastos salariales mientras buscan la liquidez necesaria para hacer frente a las deudas de la Seguridad Social y Hacienda, además del pago de los sueldos de los trabajadores que llevan ya 14 meses sin cobrar.
Según un representante de los trabajadores, ese plan de viabilidad “es creíble” y confían, al igual que el presidente de la Cámara, Manuel Barrionuevo, en que no lleguen a completarse los seis meses. Los trabajadores afectados se irán incorporando al ERTE a lo largo de la semana dependiendo de las vacaciones. Otros diez trabajadores continuarán en sus puestos, dos se encuentran de baja por enfermedad y uno está en proceso de prejubilación.
A pesar de que el mes de agosto es inhábil en muchas administraciones desde la dirección de la Cámara “no han dejado de tocar en todas las puertas” y hay muchas posibilidades abiertas. Están tramitando un préstamo con una entidad financiera, preparan la ampliación de antenas camerales, de las nueve existentes a doce, para poder llegar a toda la provincia y hacer más cercana la institución a los empresarios.
Según los trabajadores en el plan de viabilidad también se contempla la venta de patrimonio. En este sentido, respecto al edificio de la calle Hurtado, Barrionuevo considera poco menos que imposible” su venta porque está alquilado por diez años.
Aún así afrontan la vuelta del verano “ilusionados” porque el plan de viabilidad muestra que la Cámara es viable y tiene futuro, estableciendo una reducción del gasto y pendientes de varias soluciones económicas.