El Plan de Control de Mosquitos, puesto en marcha por la Diputación Huelva, está actuando en 2014 sobre un total de 130.000 hectáreas de la provincia --16.000 de marismas y 114.000 de medio urbano y rural--, realizándose más de 3.000 actuaciones en el periodo de tratamiento y también aéreos, que abarca desde 1 de marzo al 30 de octubre para garantizar el control de las plagas.
En rueda de prensa, el presidente de la Diputación de Huelva, Ignacio Caraballo, ha presentado este plan, acompañado por el jefe de servicio, José Carlos Gálvez, y ha explicado que el mismo, que cuenta con un presupuesto de 2,3 millones de euros --financiado por Diputación en un 75 por ciento y el 25 restante por los consistorios integrados en el plan--, abarca todo el año con el objetivo de "reducir las poblaciones de mosquitos a niveles soportables".
"Hace 30 años era impensable el turismo en Huelva porque era difícil convivir con los mosquitos y hoy se ocupan en verano el 90 por ciento de las 25.000 camas disponibles", ha enfatizado Ignacio Caraballo, que ha destacado que este tratamiento "ha dado tan buenos resultados que está siendo un ejemplo también fuera de nuestras fronteras", como Marruecos.
El ámbito geográfico de las actuaciones es el de los términos municipales de los municipios integrados --Ayamonte, Lepe, Isla Cristina, Cartaya, Aljaraque, Punta Umbría, Gibraleón, Huelva, Palos de la Frontera, Moguer y San Juan del Puerto--, lo que suma el total de 130.000 hectáreas.
Es este espacio aparecen dos medios claramente diferenciados. Por una parte, 16.000 hectáreas de marisma mareal donde el flujo y reflujo de las mareas en conjunción con factores topográficos y biológicos dan lugar a 4.600 hectáreas de marisma susceptibles de albergar poblaciones larvarias de mosquitos.
Y por otra 114.000 hectáreas de medio urbano y rural, donde se encuentran 25 núcleos de población, así como multitud de emplazamientos industriales, agrícolas y ganaderos, red viaria o complejos de ocio, entre otros. Todas ellas con multitud de focos de mosquitos de índole muy diversa.
Para abordar este plan 2014, el Servicio de Control de Mosquitos cuenta con una sólida estructura, con una amplísima experiencia fraguada en los 31 años anteriores, formada por 35 oficiales aplicadores, además de 14 operarios contratados por cinco meses para reforzar las labores de verano. En conjunto, junto a los capataces, biólogos, técnicos de laboratorio y resto de personal, el servicio está conformado por un total de 60 personas.
Según ha explicado el jefe del Servicio de Mosquitos, José Carlos Gálvez, las estrategias de control son complejas ya que en muchos casos se diseñan específicamente en función de las características particulares del foco. A grandes rasgos, en las marismas mareales el control va dirigido a las especies Aedes caspius y A. detritus.
A su vez, ha destacado que "en las marismas hay las mismas larvas que hace 30 años, pero el servicio las combate", indicando además que "si paramos 15 días se acaba el turismo en Huelva durante diez años". En Huelva hay dos puertas para las entradas de mosquitos, Doñana y Portugal, a lo que ha añadido que el servicio es "responsable de los mosquitos como plagas y no los que se crean en cualquier casa".