Su caso generó un gran revuelo, no solo por la facilidad con que una persona puede pasar por médico y ser contratado incluso por el Servicio Andaluz de Salud, sino porque además, ya tenía una causa abierta por el mismo motivo en Cáceres y nadie tenía conocimiento de los hechos.
Cuatro años después, Juan Carlos Cofrade Santillana ha sido condenado a ocho meses de cárcel por el delito de intrusismo y otros tantos por falsedad documental. Sus pacientes pueden respirar tranquilos, ya que difícilmente volverá a tener en sus manos la salud de una persona.
Los hechos sucedieron en 2008, cuando en enero de ese año, pese a tener un título falso de Medicina de la Universidad San Martín de Porres de Perú, optó a una oferta de empleo público del SAS y fue contratado por el Distrito Sierra de Huelva, donde durante diez meses ejerció como médico en nueve municipios, aunque principalmente en Hinojales y Cumbres Mayores.
Sobre el falso facultativo, también mentalista, adivino y naturópata, ya pesaba una denuncia de la Fiscalía de su tierra natal, Cáceres, pero no fue hasta que su nombre se vio involucrado en la Operación Estudiante, una trama de títulos falsos e intrusismo profesional destapada en Málaga, cuando saltó la voz de alarma en Huelva.
Como en Cáceres ya había una causa abierta contra Cofrade Santillana por ejercer la medicina en una mutua de Plasencia y en un centro de mayores de Villafranca de los Barros, el SAS decidió unirse a esta denuncia, al igual que el Colegio de Médicos de Huelva, donde no estaba colegiado, dado que en Andalucía la colegiación no es obligatoria.
Conformidad
Tras cuatro años de los hechos en Huelva y cinco en Cáceres, este miércoles se celebró el juicio en el Juzgado de lo Penal número 2 de Cáceres.
Según ha indicado a Viva Huelva el abogado del Colegio de Médicos, José María Mora, la defensa de Cofrade ha aceptado no recurrir el caso para llegar a la conformidad.
Aunque en un principio la Fiscalía solicitaba cinco años de prisión (tres por falsificación y dos por intrusismo), se le ha aplicado el atenuante de dilaciones indebida al llevar el caso en instrucción cinco años, entre otros motivos por tener que aunar los dos casos, el de Cáceres y el de Huelva.
Además de la pena de cárcel, tendrá que indemnizar al SAS con 54.000 euros, el dinero que percibió cuando estuvo ejerciendo como médico en la Sierra. Asimismo, se le ha impuesto una multa de ocho meses a razón de seis euros al día por el delito de falsedad en documento público. También tendrá que asumir el pago de las costas procesales.
Por esta causa también estaba imputado por falsedad en documento público el naturista José Lozano, que también ha llegado a la conformidad de la pena de ocho meses de prisión y multa de ocho meses a razón de seis euros la cuota diaria y pago de costas.
