El secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, ha asegurado que los socialistas "no se están planteando la posibilidad" de buscar un acuerdo de investidura con Cs y que sería "patético" hacerlo, aunque también ha subrayado que "todo está abierto" en materia de apoyos para formar gobierno.
Ábalos ha señalado que la dirección del PSOE tiene "muy claro lo que piensa" su militancia y cuál es el "sentimiento" de sus electores y que no piensa decepcionarlos.
"No vamos a decepcionarlos", ha garantizado el 'número tres' del PSOE en la rueda de prensa que ha ofrecido en Ferraz para analizar los resultados electorales, tras la reunión de la ejecutiva federal.
Mientras que otras fuentes de la cúpula del PSOE recalcan que no descartan "absolutamente a nadie" en la búsqueda de apoyos, Ábalos ha explicado que la prioridad es "hacer políticas progresistas" y que para la investidura de Pedro Sánchez tratarán de "conseguir los apoyos sobre programas y propuestas políticas".
"Lo primero es hablar de programas y de la visión de país", ha dicho, aunque para ello ha pedido tiempo y "tranquilidad", sobre todo porque en menos de un mes se celebrarán las elecciones municipales, autonómicas y europeas del 26 de mayo y "darán unos resultados que habrá que integrar".
Por eso, el PSOE quiere esperar a "cerrar el cuadro de gobernabilidad en España", aunque de cara a la constitución, el día 21, de la Mesa del Congreso, va a "hablar con todos los grupos para tratar de llegar a acuerdos e integrar la pluralidad que han expresado las urnas".
"La idea es generar espacios de representación, esa es nuestra visión, abrir espacios para que los grupos se sientan representados", ha avanzado Ábalos.
"No renunciamos a nada ni de antemano nos planteamos nada. En los próximos días iremos hablando con los grupos y contrastando posiciones; habrá quien no quiera nada, quien quiera colaborar y quien lo quiera todo", ha planteado.
Ábalos ha incidido en que Cs no solo ha "perdido" las elecciones, sino que "ni siquiera ha ganado sus primarias internas", en alusión a que ha sacado menos escaños que el PP, lo que a su juicio le impide "liderar de momento la derecha".
"Ciudadanos solo puede aspirar a sobrevivir como partido, pero no ha conseguido sus objetivos políticos", ha recalcado.
También ha asegurado que los socialistas no van "maniobrar para romper" el PP, como en su opinión hicieron los populares hace tres años con el PSOE.
Sobre la relación con los independentistas catalanes, ha confirmado que el PSOE va a seguir "manteniendo el diálogo" y que, cuando Sánchez supere la investidura lo retomarán "con más impulso" y siendo conscientes de que "habrá que ser originales".
Respecto a la pretensión de Podemos de gobernar en coalición con el PSOE, ha recordado que los socialistas tienen "cultura de entendimiento" y "mucha experiencia en llegar a acuerdos sin necesidad de llegar a coaliciones".
En su análisis de los resultados electorales, el dirigente del PSOE ha destacado la movilización que se ha producido, solo comparable a las de 1982, 1996 y 2004, orientadas a obtener un cambio de rumbo en el país.
Con un aumento de 38 escaños, dos millones de nuevos votantes y la victoria en 39 de las 52 provincias y en la mitad de los más de 8000 municipios españoles, el PSOE considera que ha logrado "frenar la ola reaccionaria" encabezada por Vox.
"Hemos logrado parar el penalti que la extrema derecha quiso meter a la democracia española cuarenta años después de acabado el franquismo", se ha congratulado el dirigente socialista.
En su opinión, España se ha convertido en uno de los países con la socialdemocracia más solida del mundo y Sánchez, en el "referente" para los partidos socialdemócratas europeos.
También ha interpretado los resultados como un rechazo a la "coalición anti-PSOE" y a los "comportamientos y estrategias del PP y Cs, que deberían entender que los españoles no aceptan más pactos a la andaluza".
El PSOE ha obtenido el 28,7 % de los votos y 123 escaños y ha ganado en todas las comunidades autónomas excepto Cataluña, Navarra y el País Vasco, y en 41 de las 52 provincias.
La euforia por la victoria electoral continuaba esta tarde en Ferraz, donde Sánchez ha sido recibido con besos, abrazos y muestras de alegría por los miembros de su ejecutiva.
A su llegada, la vicepresidenta en funciones, Carmen Calvo, ha remarcado la intención de "gobernar el solitario", convencida de que los ciudadanos han "entendido" lo que los socialistas quieren hacer en España.
"Estamos muy agradecidos y (vamos) a continuar sacando de la crisis social a este país, manteniendo el crecimiento de la economía, haciendo igualdad para hombres y mujeres, atendiendo a nuestros mayores, a nuestra infancia, fortaleciendo Europa, a la alegría, a la esperanza y al futuro", ha señalado.