Podemos ha comenzado esta semana a concretar la organización de su segunda Asamblea Ciudadana Estatal y, aunque todavía no han comenzado oficialmente a contrastar sus diferencias sobre cuál es el rumbo que debe tomar el partido en su nueva etapa, el secretario general, Pablo Iglesias, y su secretario Político, Íñigo Errejón, ya han protagonizado su primer encontronazo a cuenta del formato de este congreso.

Aunque ambos han dejado claro su intención de defender sus respectivos proyectos, también han manifestado su voluntad de explorar un posible acuerdo. Sin embargo, los dos principales líderes arrancan la cuenta atrás hacia el llamado 'Vistalegre II' con posturas enfrentadas sobre el diseño de ese cónclave.

Sus discrepancias tienen que ver con el modo en que se deben debatir y votar los proyectos y candidaturas que se presenten para guiar a Podemos en su nueva etapa, una vez superada la fase de "máquina de guerra electoral".

Mientras Iglesias apuesta por una única votación, en la que los documentos político, organizativo y ético estén vinculados al equipo de personas que los propone, Errejón defiende la necesidad de separar el debate de las propuestas del de las personas que se pondrán al frente del nuevo Podemos, y realizar dos votaciones diferenciadas.

La fijación de un formato u otro será especialmente relevante si el secretario general y el político no llegan finalmente a un acuerdo y deciden presentar proyectos y listas separadas, ya que todos en la organización son conscientes del peso de Iglesias entre la militancia. Las propuestas que han contando con su aval en los diferentes procesos puestos en marcha por el partido morado siempre han sido mayoritariamente respaldadas, con contadas excepciones.

De hecho, el propio Iglesias ha reconocido que se siente "abrumadoramente apoyado" por todas las "corrientes críticas" que existen en Podemos, entre las que ha empezado a ubicar a Errejón y sus afines, además de los 'Anticapitalistas'.

"ENTERRAR LA LÓGICA DEL PLEBISCITO"

De ahí que los llamados 'errejonistas' pidan separar las votaciones: quieren evitar que los simpatizantes que apuesten por sus tesis se vean en la tesitura de tener que posicionarse en contra de la candidatura de Iglesias, en el caso de que la votación sea única.

"Nuestra asamblea no tiene que ser un duelo en el O.K. Corral ni una pelea de gallos sino una contraposición de ideas, un debate de modelos políticos y organizativos para que sea la gente la que decida cuáles son los mejores", aseguraba Errejón esta semana. "Tenemos que enterrar la lógica del plebiscito", afirmaba por su parte el responsable de Discurso de Podemos y uno de los más estrechos colaboradores de Errejón, Jorge Moruno.

Por su parte, Iglesias y otros dirigentes como el secretario de Organización, Pablo Echenique, justifican la necesidad de celebrar una sola votación, avisando de que sería "raro" que el equipo que gane en las primarias para la nueva dirección tenga que poner en práctica un proyecto ideado por otro equipo.

PROPUESTAS DIFERENTES SOBRE EL FORMATO

Con todo, se trata de un primer escollo en el camino hacia el nuevo Vistalegre. De hecho, tanto Echenique como los 'errejonistas' ya preparan diferentes propuestas sobre el formato que creen que debe tener el congreso. La última palabra la tendrán los inscritos en la consulta convocada por Iglesias entre el 18 y el 19 de diciembre.

Desde el sector de Errejón, tratarán de desgranar al máximo posible los diferentes debates y desvincularlos de "las caras", según explican a Europa Press fuentes de esta "corriente" --como les ha bautizado Iglesias--. Su modelo ideal, el proceso interno de la Comunidad de Madrid, las únicas primarias autonómicas en las que la votación de las candidaturas se hizo después de la de los documentos. Argumentan que también se votó por separado en la Asamblea fundacional de Vistalegre de 2014.

También trabaja en una propuesta Echenique, tal y como confirmó ayer Iglesias, que se sumará a las que pueden presentar "cualquier grupo de personas" que cuente con el aval de una Secretaría General, un Consejo de Coordinación, un Consejo Ciudadano o un Círculo Activo de Podemos, según el reglamento elaborado por el propio secretario de Organización.

Ese reglamento, que recoge Europa Press, establece además varias preguntas que cada propuesta debe responder: "¿Cómo funciona el sistema electoral (esto es, cómo son las listas, cómo se computan los votos, correcciones de género o de otro tipo, etc.)?", "¿Cómo se asocian (o no) los documentos éticos, organizativos y políticos a las candidaturas y cuándo y cómo se votan?" y "¿Cuántos miembros electos tendrá el nuevo Consejo Ciudadano Estatal?".

Eso sí, la Secretaría de Organización especifica que, "debido a la obvia interdependencia entre estas tres preguntas y a la necesidad de que la consulta desemboque en un sistema coherente, las propuestas se votarán como un todo".