El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha defendido este lunes que es el PP el partido que debe intentar formar gobierno, a raíz de los resultados de las elecciones generales de este domingo, y al PSOE "le corresponde liderar la oposición". "No vamos a buscar pactos complejos ni pastiches de ningún tipo", ha dicho.
Así se ha pronunciado el también líder de los socialistas de Castilla-La Mancha en declaraciones a los periodistas a su llegada a Ferraz, donde el candidato del PSOE a la Presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, reúne a las 11.00 horas a la Ejecutiva Federal del partido.
García-Page ha insistido en que las urnas han arrojado una "situación tortuosa" y "complicada", pero ha remachado que la voluntad del PSOE es que el jefe del Ejecutivo en funciones, Mariano Rajoy, "intente formar gobierno".
Así, ha insistido en que el PSOE no va a buscar "gobernar a cualquier precio" porque "no lo ha buscado nunca" y, por eso, "en estas condiciones", Sánchez "dejó claro" ya ayer que le corresponde intentarlo a Rajoy. Y el PSOE tiene que "liderar la oposición", como, ha recalcado, dijo ayer el candidato.
EL PSOE TIENE "LÍMITES MUY CLAROS"
De esta manera, y al ser preguntado si contemplan la posibilidad de un pacto de izquierdas con el apoyo de Podemos, las Mareas y ERC, en caso de que Rajoy no consiga formar gobierno, ha explicado que el PSOE "tiene unos límites muy claros en su debate político y de fondo".
"No vamos a sobrepasar nunca aquellas líneas estructurales para el proyecto ni los valores esenciales del PSOE, ni tampoco nuestro concepto de unidad de España", ha dicho, para después subrayar que su partido no tiene "planes b ni c" en su agenda. "Vamos a esperar a que el presidente del Gobierno pilote el curso de los acontecimientos y a ver en qué queda esto", ha defendido.
Al ser repreguntado acerca de si no ve viable de ninguna manera que el PSOE intente formar gobierno si el PP fracasa, Page ha señalado que "si la situación se complica", "no es descartable ningún escenario", pero no lo ve "muy probable". "Lo veo más bien remoto", ha afirmado.
De esta manera, el presidente de Castilla-La Mancha ha defendido que su partido lo que tiene que hacer ahora es "gestionar la constitución de las instituciones", que es "en lo que hay que centrarse", y "hacer un análisis sosegado de los resultados".
Además, ha subrayado que este domingo, en su primera valoración tras conocer los resultados, el secretario general del partido "dejó muy claro" que corresponde intentar formar gobierno al PP. "La realidad es que es complejo todo, incluso existen bastante espacios de bloqueo, no para la investidura sólo sino para el conjunto de la legislatura y eso hace de esta legislatura una legislatura verdaderamente compleja", ha remachado.
Al margen de esto, ha descartado que los socialistas vayan a apoyar un gobierno de Rajoy, porque "la gente ha votado al PSOE para que no esté Rajoy". "Lo más importante que tiene que hacer el PSOE es ser fiel con la gente que nos ha votado, lo contrario sería simple y llanamente una traición", ha remachado.
De la misma manera, ha rechazado la posibilidad de una gran coalición, porque sería "faltarle a la palabra dada a los millones de votantes", pero además "dividir el país por la mitad, entre los que están en lo nuevo y los que están en lo viejo". "No creo que los ciudadanos hayan ido buscando eso en estas elecciones", ha dicho, aunque después ha dejado claro que en "las cuestiones esenciales del país", el PSOE va a tener "la mano tendida".
DIFÍCIL PENSAR EN UNA LEGISLATURA DE CUATRO AÑOS
Así, y preguntado por qué probabilidad ve de adelanto electoral, ha dicho que "la única ventaja táctica" en el calendario es que hay presupuesto aprobado para 2016 y el Gobierno "el que esté" puede "hacerlo con normalidad".
Eso sí, ha apuntado que ve "muy complicado incluso poder llegar a grandes consensos sobre las cuestiones principañes en España" porque "la policromía del arco parlamentario que llegar a acuerdos amplios vaya a costar mucho diálogo". "Ahí el PP tendrá que aprender andando al mismo tiempo, porque no tiene mucha costumbre", ha dicho.
Por eso, ha reconocido, "hay un componente de inestabilidad en el sistema que ha salido que hace díficil pensar en una legislatura de cuatro años". "Pero en España todo lo que va para provisional ha terminado casi siempre como definitivo", ha apuntado después.
Así, ha dicho, el "objetivo" que deberían plantearse "todos" hoy es "un escenario razonable de cuatro años" en el que "entre todos llegar a acuerdo en las cuestiones esenciales", porque están "mirando los mercados económicos" y "las próximas generaciones", que van a "requerir de acuerdos". "Estamos obligados a llegar a acuerdos", ha remachado.