El presidente del EBB del PNV y candidato a lehendakari, Iñigo Urkullu, ha acusado a "los gobiernos de Bildu" de imponer "modelos basados en la ortodoxia estalinista", algo con lo que "no se puede gobernar ni construir un país abierto". Asimismo, ha subrayado que la "endemoniada" situación política y económica "nos afecta enormemente por la debilidad estructural de los fundamentos económicos del Estado español".
Con motivo de la celebración en Bilbao del Consejo del Partido Demócrata Europeo, el dirigente jeltzale ha denunciado además que "las cumbres europeas" se han convertido en un artificioso "juego de casino" y una "refriega de orgullos de gobernantes presuntuosos que atribuyen a la Unión Europea la culpa de todos sus males".
Urkullu, que ha sido el encargado de abrir el Consejo del Partido Demócrata Europeo, ha remarcado que los proyectos políticos solo se pueden construir desde la libre voluntad de los ciudadanos "y desde el respeto no desde la imposición". Además, ha defendido que su formación cree en Euskadi y en Europa, "en una Europa en la que nos sintamos reconocidos".
En este sentido, ha subrayado que en Euskadi se está viviendo lo que ocurre cuando "se trata de imponer". "Imponer desde dentro modelos basados en la ortodoxia estalinista. Con la ortodoxia no se puede gobernar ni construir un país abierto, desarrollado, solidario y con futuro", ha incidido.
Tras resaltar que "perpetuarse en el error es sinónimo de ortodoxia, imposición y fracaso", ha remarcado que "todo esto lo estamos viviendo en los gobiernos de Bildu, por mucho que quieran convencernos con las palabras que representan otra cosa".
Asimismo, ha destacado que "en Euskadi hemos vivido lo que ocurre cuando se trata de imponer identidades por la fuerza de la ley, a espaldas de la ciudadanía".
CRISIS ECONÓMICA
Por lo que respecta a la actual coyuntura económica, que ha calificado de "compleja y endemoniada", el dirigente jeltzale ha indicado que "no hemos sido responsables de ella, pero como el efecto mariposa, nos afecta enormemente por la debilidad estructural de los fundamentos económicos del Estado español".
Urkullu, que ha abogado por "trabajar, trabajar y trabajar", ha reconocido que "es evidente" que se atraviesan momentos complicados en Europa y ha lamentado que "no existe liderazgo europeo", ya que "el egoísmo nacional preside la conducta de los Gobiernos".
"El falso debate austeridad o crecimiento convoca y alimenta la controversia norte-sur. Nosotros, desde el norte del sur, defendemos que la solidaridad es el combustible imprescindible para transitar con éxito el camino común y es el único posible", ha advertido.
A su juicio, las cumbres europeas se han convertido en un "artificioso juego de casino", una "guerra de posiciones y refriega de orgullos de gobernantes presuntuosos que usan el fácil recurso de atribuir a la Unión la culpa de todos sus males".
"Unos Estados apelan a la solidaridad, pero escasamente entienden el significado de la palabra. Obvian el esfuerzo que deben desplegar para acreditar su propia responsabilidad y reformar radicalmente su deficiente gobernanza. Otros Estados apelan a los tópicos históricos subrayando la escasa laboriosidad del resto", ha criticado.
Por ello, ha pedido que se acabe "con este estúpido juego" y ha recordado que "todos debemos salir juntos de este círculo vicioso que conduce a la nada y a destruir la obra europea".
Por último, ha insistido en una estrategia de salida común y profundizar en la Unión, así como preservar en la moneda común para evitar "el suicidio colectivo". "Se trata de que debamos continuar la labor de edificación de Europa porque no tenemos otra elección", ha advertido.