En declaraciones a un grupo de periodistas, Najmi explicó que once personas siguen ingresadas en el hospital Ibn Tufail (dentro de este complejo sanitario), entre ellas cinco miembros de una misma familia francesa, y todas ellas están fuera de peligro salvo el padre de la citada familia, cuya situación es muy grave.
El galeno agregó que los heridos que siguen en este centro son ocho franceses, dos marroquíes, y una ciudadana holandesa, y que varios de ellos se encuentran todavía en estado de shock.
Insistió en que la situación de todos los heridos es «grave» y que en el caso del ciudadano francés se requiere de respiración asistida.
Este último es el padre de una familia francesa en la que resultaron heridos el matrimonio, dos hijas menores de edad, y una tía de estas.
Las autoridades marroquíes se han puesto en contacto con el Consulado francés en Marraquech para organizar la repatriación de sus nacionales que fallecieron en el atentado, cuyo número exacto todavía se desconoce.
Después de recibir ayer la visita del ministro del Interior, Taieb Cherkaui, hoy han sido el titular marroquí de Turismo, Yasir Znagui, y el «wali» (gobernador) de Marraquech, Mohamed Mehidia, quienes visitaron esta mañana a los heridos en el hospital Ibn Tufail junto a una delegación diplomática francesa.
