Las lluvias que durante la primavera han caído en el Espacio Natural de Doñana (END) han dado un respiro a la marisma y han posibilitado a numerosas especies de aves acuáticas anidar y realizar sus puestas.
Así lo han destacado desde el propio END, donde han precisado que durante la estación en curso se han registrado hasta el momento 500 l/m2, un volumen de agua superior a los últimos tres años.
El pasado mes de marzo fue el segundo más lluvioso en Doñana de los últimos 55 años, con 145 litros por metro cuadrado, solo superado por el de 2018, con 185 litros, según los datos de la ICTS (Instalación Científica Técnica Singular) del parque nacional.
Aunque ese agua llegó tarde para la invernada, sí que está siendo positiva para las acuáticas.
De esta forma, desde el espacio natural se ha precisado que esas lluvias propiciaron la inundación de buena parte de la marisma, entorno al 78 % según los últimos datos de la Estación Biológica de Doñana (EBD-CSIC), lo que ha permitido que numerosas especies de aves acuáticas lo hayan aprovechado para la construcción de sus nidos y la realización de las puestas.
De esta forma, el personal del END ha detectado puesta de especies como la avoceta, el fumarel, la focha, el flamenco, el somormujo o, incluso, la grulla
