Nada se le resiste esta temporada al neerlandés Max Verstappen (Red Bull), ni siquiera un Gran Premio en el que nunca había subido al podio, el de Italia, en territorio de sus grandes rivales, los Ferrari, con el ambiente en contra en Monza y saliendo desde la séptima plaza de parrilla, seis por detrás del monegasco Charles Leclerc, quien no pudo brindar el triunfo a los aficionados de Monza en el 75 aniversario del Cavallino Rampante.
Los seguidores de Ferrari tuvieron que conformarse con el segundo puesto de Leclerc y el cuarto, con una espectacular remontada (salía 18), del español Carlos Sainz, mientras que Fernando Alonso, que igualó el récord de carreras del finlandés Kimi Raikkonen (349) en la categoría reina del automovilismo, tuvo que abandonar cuando luchaba por los puntos.
Verstappen, que lleva once triunfos, cinco seguidos, y va camino de la mejor marca en una misma temporada (13 de los alemanes Michael Schumacher y Sebastian Vettel), ya empieza a sacar la calculadora, con opciones de ganar su segundo título mundial en la siguiente prueba, el Gran Premio de Singapur, el 2 de octubre.
DOS REMONTADAS EN PARALELO
La mayor parte de la parrilla optaron por el compuesto medio como planteamiento inicial, salvo cinco pilotos: Leclerc, el británico George Russell (Mercedes), Verstappen, que salía séptimo por sanción, el francés Esteban Ocon (Alpine) y el debutante Nyck de Vries (Williams), que finalizó noveno (dos puntos) en su debut en la Fórmula 1 (por la baja del tailandés Alexander Albon) y fue elegido piloto del día
El 'poleman' logró mantener la primera posición ante Russell, no sin dificultad, Lando Norris, que salía tercero, se quedó clavado y perdió, de entrada, cuatro posiciones, y Verstappen inició su vertiginosa remontada, como Carlos Sainz.
El Red Bull del líder y vigente campeón avanzó dos puestos en los primeros metros y otro más poco después al despegarle las pegatinas al francés Pierre Gasly (Alpha Tauri), ganador en Monza en 2020. Tras pasar la meta por primera vez, superó al vencedor de 2021, el australiano Daniel Ricciardo (McLaren), y dejó atrás a Russell en la quinta. Ya solo le quedaba Leclerc, entonces a 2.2 segundos. Carlos Sainz le daba la réplica en el furgón de cola. En la sexta vuelta era décimo tras haber avanzado ocho posiciones.
El compañero de equipo del neerlandés, el mexicano Sergio 'Checo' Pérez, con problemas en la primera parte de la carrera, tuvo que parar en la octava y su coche regresó a pista con llamas en el freno derecho. Peor le fue al alemán Sebastian Vettel, el primero que tuvo que abandonar.
LECLERC PARA; VERSTAPPEN AGUARDA
Era la vuelta 12 (de 53) y con coche de seguridad virtual en pista, Leclerc, que lideraba, paró para calzar medios; Verstappen no entró a boxes. El líder estaba al frente y el monegasco, ya con semáforo verde, reanudó la carrera por los pelos, tercero, por delante de Ricciardo, evitando todo el tráfico que había por detrás del australiano, pero empezando a perder la carrera.
El McLaren no tardó en ver por el retrovisor al otro Ferrari, el de Sainz, que ya era cuarto en la vuelta 14, por detrás de su compañero de equipo, una posición por cada giro completado hasta entonces.
A Verstappen le llamaron para entrar en el pit lane en el ecuador de la carrera. Puso medios, mismo compuesto de Leclerc, pero el Ferrari con 12 vueltas con esa goma. El Red Bull se reincorporó entre los dos monoplazas del Cavallino Rampante.
Fernando Alonso, que marchaba sexto, se quejaba de pérdida de potencia por radio, aunque en Alpine le dijeron que estaba todo bien. Hamilton le superó con DRS en la vuelta 27 para ponerse sexto y la carrera del bicampeón se acabó en la 32 por una fuga en la presión hidráulica, según precisó su equipo.
LA CAZA, LA EMOCIÓN Y LA DECEPCIÓN
El campeón empezó a recortar de manera abrupta la renta de Leclerc, mientras Sainz, tras la pifia del Gran Premio de los Países Bajos en boxes, sustituyó los neumáticos con una buena parada, de la que regresó octavo tras Checo Pérez. El tapatío llevaba 23 vueltas con duro y solo contuvo un par de giros al madrileño.
Leclerc volvió a boxes en la vuelta 34 para poner blandos y con 19 segundos por recortar en otras tantas vueltas. Le resultó imposible, apenas inquietó a Verstappen. Pero lo que no logró el Ferrari lo consiguió, a seis giros para el final, un problema mecánico del McLaren de Ricciardo.
Con coche de seguridad en pista, los pilotos entraron a cambiar neumáticos con la esperanza de que se relanzara la carrera con todos reagrupados, pero estas se desvanecieron cuando entraron en la última vuelta detrás del coche de seguridad y sin posibilidad de que se retomara la competición en un final al sprint.
A falta de seis pruebas, y ya con opciones matemáticas de ser campeón en la siguiente, el 2 de octubre en Singapur, Verstappen sale de Europa con 116 puntos de ventaja sobre Leclerc.
Las remontadas del campeón neerlandés y de Sainz se vieron acompañadas por las del británico Lewis Hamilton (Mercedes), quinto tras haber partido desde la última fila, y del mexicano 'Checo' Pérez (Red Bull), que partía decimotercero y concluyó sexto.