Los trabajadores, en su gran mayoría mujeres, del Servicio de Ayuda a Domicilio del Ayuntamiento de Almodóvar del Río (Córdoba) se han concentrado este miércoles ante la Delegación del Gobierno andaluz en Córdoba, tras realizar una marcha a pie desde su municipio, para reclamar el pago de las cuatro nóminas que les adeuda el Ayuntamiento carbulense, cuya alcaldesa, María Sierra Luque (IU), se ha sumado a la protesta de las trabajadoras de este servicio municipal alegando que la Diputación de Córdoba no le paga al Consistorio el coste del servicio porque, según le aseguran desde la institución provincial, tampoco le paga a la Diputación la Junta de Andalucía.
Esto es lo que ha llevado a las trabajadoras a la movilización de esta jornada, con el apoyo de la alcaldesa, la cual, en declaraciones a los periodistas, ha asegurado que en más de una ocasión el Ayuntamiento ha adelantado el dinero para el pago de las nóminas, pero que ahora no se lo permite su difícil situación económica, a lo que se suma, según Luque, que no se está cumpliendo el compromiso "de que cada dos meses iban a ingresar el dinero, pero resulta que desde el pasado octubre" el Ayuntamiento no ha cobrado nada, hasta este pasado lunes, cuando ya sí le han ingresado "algo de dinero", y ahora lo que quiere saber el Consistorio es "cuándo va a cobrar", sin que traten al Ayuntamiento como a "una pelota, a la que mandan de un sitio a otro".
Aunque Luque es consciente de que a la Junta le están afectando "los recortes de Rajoy", ha señalado que también es cierto que "la Junta se ha comprometido a que la Ayuda a Domicilio siga adelante", y por eso el Consistorio y las 65 personas que prestan este servicio en Almodóvar a 122 usuarios del mismo lo que quieren es "conocer realmente cuáles son los planes de las administraciones central y autonómica para este año, es decir, si el Servicio de Ayuda a Domicilio tendrá viabilidad en el futuro o está abocado a su desaparición tras las reformas y recortes que se están acometiendo por parte del Gobierno central".
Entre tanto, la portavoz de las trabajadoras, Carmen Quesada, ha destacado que ellas no pueden seguir en la actual situación, pues hay ya casos en los que las empleadas tienen que recurrir a la caridad de familiares y amigos, además de a Cruz Roja y a Cáritas, "para poder dar de comer a sus hijos" y pagar sus hipotecas.