La secretaria general del PSOE de Cádiz y presidenta de la Diputación, Irene García, se ha pronunciado hoy respecto a la propuesta de supresión de las Diputaciones recogida en el acuerdo con Ciudadanos, manifestando su total desacuerdo y en este sentido, ha defendido “la importancia y eficacia de las diputaciones provinciales en lo que significa la gestión diaria de los ayuntamientos pequeños”. Como alcaldesa que fue y ahora desde su responsabilidad como presidenta de la Diputación de Cádiz, Irene García, considera “un error el planteamiento tal y como está formulado” ya que su experiencia con la institución provincial- recalca- “no ha podido ser más positiva durante todos estos años”.  
Así, sostiene que “cumplen un papel fundamental en la cohesión territorial, si bien es cierto que hay cuestiones que pueden ser mejorables como sucede con otras instituciones y en ello estamos en el PSOE con el ambicioso programa de reformas que proponemos pero respetando siempre el trabajo que desarrollan y lo que significan”. En la misma línea, recuerda que “desde que ha llegado a la presidencia, ha sido la primera en cambiar y en innovar la Diputación para adaptarla a las necesidades de los ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes creando el Consejo de Alcaldes, el portal de la transparencia o poniendo en marcha un plan de empleo dirigido a los pueblos pequeños, entre otras cosas” y precisa que “la supresión de las diputaciones pondría en jaque a muchos servicios que se prestan desde la institución provincial y que son fundamentales como la lucha contra los incendios, la asistencia urbanística, las basuras o la recaudación de impuestos”.
Con todo, la dirigente socialista insta a la Ejecutiva federal “a que reconsidere en el texto del acuerdo con Ciudadanos la literalidad de la propuesta realizada, que recapacite la manera en que se expresa y lo rectifique porque nadie que haya tenido relación con las diputaciones puede estar de acuerdo en que sean suprimidas, en que sean demonizadas ahora, desdeñando el trabajo que desde las mismas se ha venido realizando”. “Nos preocuparía mucho que se adoptara un acuerdo que fuese en contra del sentir, de las propuestas y de la historia del partido”, abunda, precisando que “centrar todo el debate en las diputaciones es una equivocación”. “Con todas las cuestiones importantes que hay que acometer, que entre las cinco primeras se haya señalado a las diputaciones pues la verdad es que no se entiende y menos desde la labor que realizan”, asegura al tiempo que apunta a “una reforma más urgente de otras instituciones como es la del propio Senado”.       
García considera que “los ayuntamientos lo que necesitan principalmente es una Ley de financiación de la Hacienda local ajustada a las competencias que desarrollan y que garantice la mejora de la calidad de los servicios públicos que se prestan”. Y en este sentido, ha mostrado su sorpresa porque “ahora algunos se erijan en defensores de las diputaciones cuando las han tenido sumidas en la inercia durante estos años y en la más absoluta inactividad y desidia”. “Durante cuatro años han tenido a la Diputación suprimida de facto, años en los que hemos sufrido y visto la falta que hace en los pueblos”, añade. Por otro lado, subraya la incongruencia del PP que “ahora se muestra adalid del mundo municipal cuando ha cometido el mayor atentado contra la autonomía de los ayuntamientos con la reforma de la administración local que privatizaba servicios públicos, eliminaba competencia a los alcaldes y acababa con las entidades locales autónomas y los pueblos pequeños”.   
  Respecto a la consulta a la militancia que se celebrará este sábado en las sedes de las agrupaciones socialistas, la secretaria general asegura que “la Ejecutiva provincial velará para que se cumpla el voto secreto e individual y no habrá directriz alguna desde la dirección, lo haremos como solemos afrontar cualquier proceso interno, desde la más absoluta neutralidad”, pero “ello no será óbice para que Irene García, por convicción y experiencia personal, manifieste su total desacuerdo con la supresión de las diputaciones”.