Según esa institución, alrededor de 300.000 niños acuden anualmente al médico en el Reino Unido aquejados de problemas relacionados con el humo de los cigarrillos que fuman las personas que están a su alrededor.
Entre esos problemas, los médicos citan el asma y la meningitis bacteriana.
No obstante, los grupos de presión que defienden el derecho a fumar argumentan, sin embargo, que un automóvil es un espacio privado.