Zahora esconde rincones maravillosos para disfrutar del sol, el mar, la naturaleza, la tranquilidad y la gastronomía más típica de la zona. Lugares con encanto como el Restaurante ‘La Traíña’, que emerge del espíritu emprendedor de una familia barbateña, cuya vida ligada al mar, pone al servicio de turistas y foráneos todo su conocimiento y potencial gastronómico con el pescado fresco como especialidad.
Entre el verde de plantas y jardines y una renovada y exclusiva decoración en blanco, forja y madera –con mobiliario y elementos decorativos del afamado Javier Ayarza- este agradable establecimiento hostelero, fundado en 2011 por Ramón Barrientos y bautizado con el nombre de ‘La Traíña’ en honor a la trayectoria y herencia marinera familiar, da la bienvenida a la temporada estival en Zahora,- con una filosofía sencilla y efectiva basada en “una materia prima de calidad, un lugar acogedor y un trato amable y profesional”, tal y como explica Antonio Barrientos, hermano del fundador de ‘La Traíña’ que, junto a su primo Alejandro Montero, y contando con el apoyo familiar de su madre y su tía y un gran equipo de profesionales, dirigen desde hace tres años este emblemático restaurante en una de las zonas de mayor afluencia turística de la costa gaditana, siendo ya un todo un referente en el sector por su profesionalidad y buen hacer.
Sugerencias
Algunas sugerencias de la casa son el pescado fresco al carbón, arroces, atún rojo de almadraba en todas sus vertientes, unos boquerones en tempura con salsa agridulce, las almejas a la marinera especialidad de la casa. Y de postre ‘La Breña’ una mouse de piñones con romero y enebro. ¡Buen provecho!
COVID-19
‘La Traíña de Zahora’ inicia la temporada con optimismo y adoptando el protocolo y todas las medidas de seguridad establecidas tras la finalización del Estado de Alarma provocado por la crisis de la COVID-19. La ampliación de la zona de aparcamiento y del jardín, el respeto de la distancia de seguridad entre las mesas y la limpieza y desinfección de todo el establecimiento, serán clave para garantizar la seguridad de los comensales.
En carta
En ‘La Traíña’ de Zahora dos generaciones confluyen a la hora de ofrecer a sus comensales una carta de lo más atractiva. Por un lado, la cocina tradicional y de fogones, a cargo de las hermanas Pepi y María Montero Gil, profesionales de dilatada trayectoria por toda la geografía española; y, por otro, la cocina de vanguardia de Alejandro, que ha heredado de su madre la pasión y destreza por el arte de la restauración, ampliando sus conocimientos con las innovadoras y emergentes técnicas culinarias. Y es que todo, absolutamente todo, desde las salsas, aliños, cremas y fumets, a las croquetas y sus afamadas tortillas de camarones, se elaboran de forma casera.
“Nuestra máxima es satisfacer a todo tipo de comensal, desde que viene buscando un buen pescado fresco al carbón -a vista en su vitrina (salmonetes, corvina, caballas, sardinas…)-; como al que busca una cocina innovadora de elaboraciones y sabores sorprendentes; sin olvidar el atún rojo de almadraba de Gadira, en guisos tradicionales (atún encebollado), a la plancha o en crudo (tartar, tataki, sashimi…)”, explica Antonio Barrientos, quien se encarga directamente de asesorar a cada cliente según sus preferencias. “En carnes”, continúa Barrientos, “las de Paco Melero de Vejer, calidad garantizada”. Y, para finalizar, postres de elaboración casera como la mouse de chocolate con reducción de legendario con menta y plátano frito con canela y azúcar moreno; o helado artesano de albahaca y piñones.