Sus instrucciones fueron que a aquellas familias que no tuviesen recursos suficientes para el confinamiento, no les faltasen alimentos, productos de limpieza y de higiene personal, luz y agua. “Garantizar el bienestar de los vecinos fue mi mayor preocupación”, afirma Miguel Molina. El alcalde de Barbate cuenta en esta entrevista cómo ha transcurrido el confinamiento y la vuelta a normalidad en la localidad, destacando “el papel fundamental que han desempeñado el CECOP y la Comisión del COVID”, así como el “ejemplar” comportamiento de los vecinos y vecinas de Barbate.
¿Cómo ha vivido el confinamiento? ¿Y la vuelta a la normalidad?
–A nivel personal, el confinamiento lo ha vivido mi familia, porque yo no he parado de trabajar. Hemos estado viniendo al Ayuntamiento y manteniendo reuniones para coordinar todo el dispositivo municipal tras la declaración del Estado de Alarma. Lo hemos vivido muy preocupados, puesto que estamos hablando de la salud de nuestros vecinos y hemos tratado de ayudar lo máximo posible. Sí me gustaría destacar que gracias a que contábamos con el Centro de Coordinación Operativo (CECOP), tomamos medidas incluso antes de que se declarara el Estado de Alarma, durante el que creamos la Comisión del COVID con profesionales sanitarios del municipio. Se tomaron a tiempo y de forma consensuada decisiones importantes como el cierre de las instalaciones deportivas, el Hogar del Pensionista –donde se encontraban las personas más vulnerables-; de las playas, parques, etc. Ahora ya en Fase 3, con la desescalada y la vuelta a la normalidad, el sentimiento de preocupación sigue ahí. Es cierto que el miedo inicial se ha pasado, pero el riesgo de rebrote me preocupa bastante, ya que durante el confinamiento era más fácil controlar, pero ahora es imposible. Por ello, apelamos al sentido común de los barbateños y de los que vengan de fuera. Por otro lado, soy optimista al ver cómo se reactiva el comercio y la hostelería, y al comprobar que los datos del paro no han sido tan malos. Los empresarios barbateños están dando la talla y están demostrando que están dispuestos a esforzarse en momentos complicados apostando por Barbate como un proyecto de garantía.
En su opinión, ¿Cómo valora la responsabilidad de los vecinos?
–El 95 por ciento de la población ha tenido un comportamiento ejemplar en todos los niveles. Y pienso que esto ha sido en parte gracias a la información que desde el primer momento se le ha transmitido desde la Comisión del COVID. Cuando a la gente le trasmites de una manera eficaz, como se hizo, la gravedad de la situación, la reacción es de sobresaliente. La gran mayoría de la gente lo entendió y se supo confinar y quedarse en su casa, siempre con excepciones contadas de personas contra las que se tuvo que actuar. El buen funcionamiento de los Servicios Sociales ha sido clave, ya que hemos cubierto las necesidades y carencias de los vecinos para que no tuvieran que salir. Barbate ha hecho piña y ha demostrado gran solidaridad. Con la ayuda de las asociaciones, del economato, del empresariado local y de particulares…, se han cubierto las necesidades y se formado un gran equipo.
¿Qué medidas de apoyo se han puesto en marcha desde al Ayuntamiento para el sector turístico y hostelero?
–Hemos subvencionado la basura industrial, el impuesto de sillas y mesas, así como el mercadillo municipal, entre otras cosas. Pero no podemos quitar impuestos como se nos pide ya que estamos sujetos a un Plan de Ajuste. Barbate está muy limitado en estas cuestiones y aunque nos gustaría adoptar más medidas, los informes de intervención en contra lo impiden. Los Servicios Sociales municipales ha sido el pulmón durante la COVID, y Seguridad Ciudadana con Protección Civil han estado trabajando en primera línea. El personal del Ayuntamiento también ha hecho mucho mediante el teletrabajo para descongestionar delegaciones importantes como Urbanismo, Recursos Humanos… Hemos dado las soluciones que hemos podido.
Como administración local, ¿Se ha sentido solo o ha notado el apoyo de Diputación, Junta y Gobierno?
–Hemos notado un poco de descoordinación y frialdad, algo lógico por otro lado. Como alcalde he echado en falta reuniones virtuales por zonas, por ejemplo una vez a la semana, para contar que está pasando. Hemos tenido alguna llamada con subdelegación de la Junta, pero, en mi opinión, insuficiente. Eso sí, cuando se les ha llamado han estado. Sí que es cierto que la Diputación ha sido la primera en tomar medidas y ha hecho que el resto de administraciones hayan ido poniéndose las pilas. Me enorgullece decir que un municipio como Barbate, con tantas carencias, ante un problema tan importante ha estado a la altura. Seguimos pidiendo que nos liberen la PIE, a lo que me contestan que teníamos que haber aprobado los fondos de Ordenación en 2018 (que no se hizo por la oposición) y seguiremos pidiendo soluciones para Barbate.
¿Cómo valora la labor de la oposición (PP- PSOE)?
–Hemos trabajado conjuntamente, hemos hecho propuestas y hemos tratado de coordinarnos en la medida de las posibilidades con el equipo del COVID. Por lo general, no me puedo quejar, han actuado correctamente. La oposición entendió perfectamente la difícil situación y que no era el momento de hacer política, aunque a partir de ahora puedan intentar sacar su rédito político.
¿Qué opina del Ingreso Mínimo Vital?
–Es una medida necesaria con la que estoy totalmente conforme, pero que llega tarde. Se trata y es idéntico a lo que aprobamos en Barbate en Pleno en el año 2014. Fue una propuesta que presenté yo, como portavoz del PA, lo llevamos al Parlamento Andaluz y allí fue rechazado por la que hoy lo propone en el Ministerio, que en aquellos tiempos era consejera de la Junta de Andalucía. Pero nunca es tarde si la dicha es buena.
¿Cuáles son sus prioridades como regidor en la actualidad?
–Tratar de controlar las posibilidades de contagio. Hay que tratar de que no se nos vaya de las manos. Es la máxima preocupación de todos los alcaldes con los que he hablado. Nadie va a poder controlar la situación, por lo que pido no bajar la guardia. Al mismo tiempo, intentaremos adecentar la ciudad, con un servicio de limpieza acorde a las necesidades, que los servicios de playas funcionen lo mejor posible y trabajar para buscar la recuperación económica. Los empresarios están dando la talla y cada uno sabe qué es lo que más le conviene a su negocio y sus posibilidades, dentro de las medidas aprobadas. En este Ayuntamiento van a encontrar apoyo y agilidad para quienes puedan y quieran ampliar su terraza, o cualquier otra propuesta factible.
¿Qué mensaje darías a la ciudadanía?
–Lo primero, agradecerles su comportamiento, tanto a la población como a todos los que nos han acompañado y ayudado en la comisión de la COVID: enfermeros, médicos, personal de Protección Civil, Policía Local, bomberos, Guardia Civil… Si seguimos así, esto lo vamos a superar entre todos. Somos un municipio acostumbrado a circunstancias complicadas y hemos sabido salir adelante. Barbate ha demostrado ser un pueblo solidario, fuerte, maduro, unido y seguro. Hemos sacado lo mejor de nosotros, con especial mención a la lección de humanidad de nuestros mayores. Ánimo Barbate.