La situación económica despierta la imaginación de los que más saben del sector comercial, y para ello, estos 20 establecimientos antequeranos han organizado ellos mismos un desfile en el que mostrar sus últimas colecciones. “Hay que aplaudir y colaborar en iniciativas como éstas que contribuyen a la dinamización y reactivación del sector comercial del centro, un sector que a su vez demuestra con este desfile la capacidad de innovación y la riqueza de ideas con la que cuenta”, declaró la concejala de Comercio y Promoción Económica del Ayuntamiento de la localidad, Pepa Sánchez.
El objetivo es dar vida a la zona más tradicional del comercio del centro. “Se trata de crear un escaparate abierto a todo el que pase o se acerque por el centro de la ciudad. La tarde se ha convertido en una fiesta para nosotros, todos han querido participar no sólo con moda y complementos, sino también, con sorteos de viajes y varios productos que se venden en la zona. De este modo, además de ver las colecciones también pueden llevarse un regalo a casa”, detalló Amelia.
Todo está listo. Música, luces, cámara ... comienza el espectáculo. Con alfombra roja incluida y la participación de una veintena de jóvenes de la ciudad, el centro de Antequera se convirtió en una pequeña Cibeles en la que se mostraron las últimas tendencias en moda, peluquería, maquillaje y complementos. “Hemos elegido a las modelos, hemos preparado la música, el decorado, las sillas, todos los detalles para mostrar nuestra cara más moderna y renovada, somos un comercio tradicional y cercano pero abierto a nuevas ideas”, finalizó la comerciante.
La variedad marcó un desfile que demostró que el comercio del centro ofrece una amplia gama de servicios y artículos de calidad y próximos entre sí. Más de cien personas vieron pasar por la pasarela lo último en colecciones de noche, complementos, calzado, tocados, peluquería, maquillaje, y por supuesto, lo último en moda para este otoño - invierno en varios estilos que iban desde el más casual para la mujer del día a día, hasta la elegancia necesaria para no pasar desapercibida en una noche de fiesta. El toque de color lo puso el joven diseñador antequerano, Curro Durán, que presentó algunos de los vestidos de gitana que desfilaron por el Salón de Moda Flamenca de Sevilla (SIMOF) 2009 con un estilo clásico en colores que iban desde el rojo hasta los tonos pastel, acompañados del tradicional mantón de manila.
El broche de oro lo puso una degustación de vino suave, el sorteo de un fin de semana con todos los gastos pagados y un espejo de pared. Una jornada en la que estos 20 comerciantes del centro marcaron un antes y un después en la forma de promoción, demostrando que lo tradicional no está reñido con las nuevas ideas.