Estos cuatro guardias civiles han declarado como testigos en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de Barbate
Los cuatro guardias civiles que sobrevivieron al ataque de una narcolancha en el puerto de Barbate (Cádiz) el 9 de febrero, en el que murieron dos agentes, han confirmado ante un juzgado de la localidad que fue una acción intencionada y han declarado que no han podido identificar a sus tripulantes.
Estos cuatro guardias civiles han declarado como testigos en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de Barbate y han detallado que hubo varios intentos de ataque por parte de una narcolancha, la de mayor tamaño de las que se encontraban en el puerto, entre ellos dos embestidas graves y la tercera mortal, según ha declarado a los periodistas el abogado de una de las acusaciones, Andrés Carreño.
Este abogado ha señalado que los agentes, que se encuentran afectados por lo ocurrido, han dicho a la jueza que, dadas las circunstancias en las que se produjeron los hechos, no han podido ofrecer más detalles de los tripulantes de la narcolancha, aunque recuerdan a una persona con una prenda "más brillante o llamativa", de color naranja o rojizo.
Estas declaraciones se producen después de que se conozca el nuevo informe de la Unidad Central Operativa (UCO) que descarta la participación de los seis encarcelados por la muerte de dos guardias civiles.
Los abogados de esos seis detenidos han reiterado ante el Juzgado de Barbate la petición de puesta en libertad de los detenidos que permanecen en prisión provisional.