El Juzgado de Instrucción número 4 de Jerez de la Frontera (Cádiz) ha ordenado este miércoles el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza del septuagenario detenido por matar y desmembrar presuntamente a una mujer de 64 años, cuyos restos tiró a un pozo en la zona rural de Jerez de la Frontera (Cádiz).
El detenido, que ya confesó los hechos ante la Policía cuando fue arrestado tras el hallazgo del cadáver, ha prestado declaración ante el juez de guardia, que se inhibirá en favor del Juzgado de Instrucción número 1 de Jerez, según ha informado el TSJA.
El presunto homicida fue detenido el pasado domingo, después de que la Policía siguiera sus pasos al sospechar que estaba detrás de la desaparición de la víctima, con la que mantenía "relaciones esporádicas" y que estaba siendo buscada desde el 6 de julio.
Ese día la mujer fue vista por última vez en el albergue municipal de Jerez de la Frontera, en el que residía después de terminar la relación sentimental que mantenía con otro hombre.
La Policía emprendió su búsqueda ante las sospechas de que hubiera desaparecido de forma "involuntaria, forzosa y con riesgo para su vida".
El pasado 1 de agosto la Policía Nacional pidió la colaboración ciudadana para su búsqueda, con un mensaje en el que, junto a su foto, detallaba que la mujer tenía 64 años, nació en Irán en 1958, tenía la piel blanca, complexión delgada, 1,60 metros de altura, 55 kilogramos de peso, cabello corto, rubio y rizado, ojos verdes, usaba gafas graduadas y necesitaba medicación.
El hombre, que había cumplido 15 años de prisión por un delito similar al que ha confesado cometer ahora, golpeó en la cabeza a la mujer “por un arrebato”, después de que él se molestase porque ella “no paraba de fumar y beber”. Tras el golpe, la remató con un hacha, la desmembró y tiró los restos del cuerpo, envueltos en plástico, en un pozo en la zona norte de Jerez, según ha relatado su abogado a "El País".
