El Ayuntamiento recupera el entorno de Coca de la Piñera

El Ayuntamiento de Jaén ha devuelto a la ciudad todo el entorno de la estación de autobuses. El hotel Rey Fernando, el subsuelo tanto de la plaza Coca de la Piñera como de la estación y un local aledaño a ésta serán recuperados por el Consistorio. Para ello, deberá pagar, en los próximos seis meses, 2,09 millones de euros a la familia Olivencia, a quien fueron vendidos por el anterior equipo de Gobierno del PP. "Ese dinero no está en las arcas municipales y tampoco parece que se invirtieran en los barrios", lamentó la alcaldesa, Carmen Peñalver. 

El objetivo es "recuperar el gran esplendor de antaño de la manzana de la estación", dijo Peñalver, en la firma de las escrituras. El pago de los 2 millones se repartirá en dos plazos: 300.000 euros antes de mediados de mes y el resto en los próximos seis meses. 

El Hotel Rey Fernando, ubicado en los pisos superiores de la estación y que está cerrado desde hace más de tres años, será rehabilitado por la empresa concesionaria que cumpla con el pliego de condiciones que ha abierto el Ayuntamiento. Todas las instalaciones deberán ser recuperadas, a excepción de la terraza que se incluirá en las obras de adecuación de la estación de autobuses. 

La Plaza Coca de la Piñera será adecuada por el Ayuntamiento, que descarta la construcción de un parking subterráneo en la zona. "Fue un gran error, ya que no es un lugar adecuado", advirtió la alcaldesa, quien incidió en que el PP debería pedir disculpas por su actuación en esta vía. 

La cafetería de la estación, cuya explotación ya ha sido adjudicada por el Ayuntamiento, también será recuperada por la empresa concesionaria. Asimismo, ésta deberá asumir la plantilla de once trabajadores con los que cuenta en la actualidad.

Concesión del hotel
Se sacará a concurso público, al igual que se ha hecho con la cafetería. No obstante, la alcaldesa confió en que haya muchas empresas jienenses que estén interesadas en la explotación de este céntrico hotel. En concreto, Peñalver anunció que la familia que lo explotaba antaño está interesada.