El prior de la Orden, Miguel Puerta, prefirió no ahondar en este asunto para ser precavido, pero sí ha confirmado a este periódico que ?tiene muy buena perspectiva y confianza?
La coronación de Dolores de Servitas puede estar cerca. Este periódico ha podido saber que algunos de los trámites que se habían quedado enquistados por cuestiones ajenas a la Venerable Orden Tercera van camino de solventarse. A esto se une la intención que al parecer tiene el obispo de la Diócesis de dejar este asunto resuelto antes de jubilarse.
El prior de la Orden, Miguel Puerta, prefirió no ahondar en este asunto para ser precavido, pero sí ha confirmado a este periódico que “tiene muy buena perspectiva y confianza”. En este sentido, aseguró que la junta de gobierno nunca había dejado de trabajar para conseguirlo, porque hay razones para ello.
En estos momentos cobra fuerza la petición realizada por el pregonero de la Semana Santa 2010, José Manuel Romo Madera, que clausuró su pregón pidiendo al obispo la coronación merecida e inmediata de Dolores de Servitas y de la Virgen de las Penas de la Archicofradía de la Palma. El Prelado parece haberse puesto las pilas para conseguirlo, y la Parroquia de San Lorenzo lo está respaldando.
Por otro lado, el prior de la Orden ha confirmado que habrá retrasos para devolver a la Virgen a su altar de cultos. Puerta explicó que habían surgido complicaciones en los trabajos de restauración de la capilla, por culpa de las aguas caídas durante el invierno. De ahí que se hayan tenido que desmontar los retablos para arreglar las paredes.
En este caso, se intentará recuperar el color primitivo de la pared, ya que algunas zonas de la capilla han sido pintadas en diversas ocasiones a lo largo del tiempo. La empresa encargada de ejecutar estos trabajos es JMR (la misma que se ha contratado para el Carmen). Ya se ha culiminado la rehabilitación de la sala de acceso a la capilla desde la calle. Además, el Ayuntamiento ha contrató a una empresa especializada para proceder al desmontaje de los cuadros de la capilla y a su posterior embalaje mientras duran las obras, así como reponerlos en su lugar habitual una vez haya concluido la rehabilitación.
En un principio, se previó que la Virgen pudiera volver a su altar de cultos en el mes de septiembre, pero el prior cree que esto no será posible hasta finales de octubre como mínimo.
Esta obra ha dejado estampas insólitas como la ocupación del altar mayor de San Lorenzo para la celebración de los cultos de Dolores de Servitas durante la pasada Cuaresma.