La fuerte granizada caída ayer tarde en algunas zonas de Jerez dejó un paisaje extraño en estos lares, ya que por unos momentos la ciudad se conviritió en un paisaje 'nevado' por unos instantes, lo que tardó en desaparecer la lluvia en forma de granizo.
Pese a la fuerza con la que caía el granizo, el grosor de éste no era excesivamente importante, por lo que no provocó ningún daño en los inmuebles o los vehículos aparcados, aunque sí dejó en un estado muy peligroso algunas de las carreteras, ya que se encontraban muy resbaladizas.
