El Museo Arqueológico de Almería acoge desde este lunes y hasta el 5 de mayo el cuadro 'El bufón Calabacillas', uno de los retratos más conocidos de Velázquez, gracias a la cesión realizada por el Museo del Prado dentro del proyecto 'De gira por España' con el que, con motivo de su bicentenario, llevará a diferentes ciudades españolas de pequeño y mediano tamaño obras de Goya, Tiziano, Murillo, Rafael, Zurbarán, Sorolla, Poussin, La Tour y El Greco.
"Estamos muy orgullosos y muy contentos de celebrar la llegada de este cuadro", ha manifestado ante los periodistas instantes antes de su presentación el ministro de Cultura y Deportes, José Guirao, quien ha asistido a la presentación de la obra junto a la consejera de Cultura y Patrimonio Histórico, Patricia del Pozo, y la director del Museo del Prado, Miguel Falomir.
Guirao ha encuadrado esta actividad como una de las "más interesantes" en la celebración de los 200 años de la pinacoteca, que va a propiciar "26 exposiciones como esta por toda España" con "una obra diferente" en cada ciudad para celebrar uno de los "acontecimientos del año" en el mundo de la cultura, según ha apuntado.
"Desde el Ministerio y desde el propio Museo se ha intentado que sea una celebración para todo el mundo, que no se quede en Madrid sino que viaje por todo el territorio nacional, también como una llamada de atención para el público español, para que visite también el Prado que es nuestro museo más importante", ha destacado el responsable de Cultura.
En esta línea, ha ensalzado la figura de Velázquez al tratarse del "mejor pintor de la historia del arte" que "llevó la pintura más lejos en su momento y abrió muchos caminos" tras su redescubrimiento en el siglo XIX por los pintores de la época. "Venimos con lo mejor de El Prado, que ya es decir que venimos con lo mejor del mundo", ha recalcado.
Por su parte, el director de El Prado ha recordado que Andalucía acoge 401 obras del museo depositadas "de forma permanente" en diferentes salas, si bien Almería "apenas tiene seis", por lo que ha sido uno de los aspectos valorados para exponer la obra, junto con las infraestructuras museísticas de cada ciudad y el personal que gestiona las instalaciones, por lo que ha destacado el trabajo del Museo de Almería.
"Hemos intentado evitar las grandes ciudades, aquellos sitios a los que están más acostumbrados. No vamos a Sevilla, a Barcelona, a Valencia o a Zaragoza, sino aquellos sitios que no han podido disfrutar de las obras", ha detallado Falomir, quien ha apuntado los protocolos de seguridad seguidos para trasladar un cuadro dotado con una "sensibilidad contemporánea" gracias a la "mirada compasiva de Velázquez" y a su "técnica prodigiosa".
INICIATIVA PARA LA OBRA DE PICASSO
Por su parte, la consejera de Cultura de la Junta de Andalucía ha aplaudido dicha iniciativa para acercar el arte a las diferentes ciudades y ha anunciado su interés en "seguir en Andalucía" esta idea a través de la obra de Pablo Picasso.
"¿Por qué no vamos a poder ver un Picasso en Almería o en el Bellas Artes de Sevilla? Por tanto, es una iniciativa que también vamos a poner en marcha", ha indicado la titular andaluza de Cultura en su primera visita institucional a la provincia, en la que ha avanzado además su próxima vuelta tras la Semana Santa para detallar un plan de mejora en La Alcazaba de Almería y en el yacimiento de Los Millares.
En cuanto a la exposición, ha subrayado que se trata de un "motivo de satisfacción" contar con un cuadro del pintor sevillano de manera temporal para hacer Almería "capital de Velázquez y de Andalucía" en el plano cultural y hacer de la cultura "punto de unión" y de "convivencia" entre todos en un "gesto de cultura universal".
'El bufón Calabacillas' (1635-1639) es uno de los retratos más conocidos de Velázquez que plasma en óleo sobre lienzo a Juan Calabazas, que sirvió primero como bufón del cardenal infante don Fernando de Austria y en 1632 pasó al servicio del rey, para morir siete años más tarde.
Es uno de los varios retratos de bufones de Velázquez que basan su eficacia comunicativa en la presencia imponente del personaje en un primerísimo primer plano, su ubicación en un lugar indeterminado, su extraña y casi descoyuntada postura y su expresión insólita. En esta obra destaca el tratamiento técnico, sobre todo de la cabeza, realizada a base de un eficaz difuminado.