La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a penas que suman 18 años de prisión a los patrones de una patera que fue interceptada con 23 personas a bordo, entre ellas dos menores de edad, cuando navegaba a 32 millas náuticas en aguas de Cabo de Gata, frente al litoral de Carboneras.
La sentencia de la Sección Tercera, a la que ha tenido acceso Europa Press, impone a A.H.; S.A.K.; y F.B., de 33 y 20 años, penas de seis años y un día de prisión como presuntos autores de sendos delitos contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.
El fiscal solicitó siete años de cárcel ya que la embarcación neumática "carecía de toda medida de seguridad" y en su interior viajaban dos menores de edad, acompañados de sus padres mientras que defensa pidió la libre absolución al ser rechazada la nulidad de actuaciones que solicitó por no haberse incorporado a la causa una grabación de video.
El tribunal considera acreditado que los tres acusados, de nacionalidad argelina, "transportaron" a 22 varones y una mujer desde las costas de Argelia hasta España, "guiando y pilotando una embarcación tipo patera" de acuerdo a las manifestaciones de dos testigos protegidos que los señalaron como "los que llevaban la brújula y controlaban el rumbo de la travesía".
Recoge, en esta líneas, que los citados testigos, que no estuvieron presentes en la vista oral, apuntaron que uno de ellos era "el encargado de cobrar el dinero" por el viaje a los ocupantes de la lancha, "a los que daban órdenes" sobre cómo tenían que comportarse al acercarse a tierra. El fiscal recogía en su escrito de conclusiones que abonaron una media de 500 euros.
La sentencia remarca que los agentes de la Policía Nacional de la Ucrif que prestaron testifical en sala indicaron que los testigos protegidos "desde el inicio" hablaron de tres personas que "dirigían" la travesía e identificaron a A.H.; S.A.K.; y F.B., como esas personas "sin género de dudas".
Considera el tribunal que a ninguno le movió en su declaraciones "venganza o resentimiento" que les restase credibilidad frente a las manifestaciones exculpatorias de los tres acusados, que en el juicio aseguraron que se encontraban en "igual situación que los restantes ocupantes de la embarcación" y que "también tuvieron que pagar dinero por el viaje".
La embarcación neumática, "carente de toda medida de seguridad" según resalta el fiscal, fue localizada por Salvamento Marítimo a las 18,55 horas del 28 de mayo de 2012 cuando se encontraba navegando a unas 32 millas náuticas del litoral de Carboneras. Los ocupantes fueron rescatados y trasladados hasta el puerto de Almería, donde fueron atendidos por voluntarios de un Equipo de Respuestas Inmediata ante Emergencias (ERIE) de Cruz Roja.
